El Rojo quedó en el fondo del grupo de la Sudamericana tras perder con Guaraní. Kevin Lomónaco, con la fe intacta a lo Palermo en el 2000, le pide al hincha que siga creyendo. Se viene una seguidilla brava y Vaccari analiza rotaciones.
## ¿Se terminó el sueño copero? Independiente en la cuerda floja tras la derrota con Guaraní
La derrota contra Guaraní dejó al Rojo en terapia intensiva en la Copa Sudamericana. Con tres puntos en tres partidos, el equipo de Vaccari está último en el Grupo A y sin margen de error, como si estuvieran jugando un partido definitorio con el descenso en la última fecha. El Rey de Copas, un equipo acostumbrado a estas instancias, se encuentra ahora en una situación complicada por errores propios y falta de contundencia, como si el Bocha fuera el 9 y errara un gol abajo del arco. La preocupación es que este bajón se traslade al torneo local, donde se vienen las etapas decisivas. ¿Será capaz el Rojo de levantar cabeza o terminará como el Cholo Simeone en la Champions, siempre cerca pero sin la orejona?
### Lomónaco, la voz de la esperanza en el vestuario del Rojo
En medio de la tormenta, Kevin Lomónaco, defensor del Rojo, salió a bancar la parada y le pidió a la gente que mantenga la fe. “Al hincha le digo que siga creyendo”, tiró el central, con una convicción digna del Ratón Ayala en sus mejores épocas. «Sentimos mucha bronca porque, en líneas generales, hicimos un buen partido. Tuvimos errores puntuales que en esta Copa se pagan carísimo. No merecíamos perder, ni siquiera empatar», analizó Lomónaco, reconociendo los errores pero sin perder la esperanza. «Cometimos errores que le pueden pasar a cualquiera. Ellos aprovecharon las que tuvieron y se llevaron los tres puntos casi de casualidad”, agregó, con una bronca contenida que se sentía hasta en Asunción.
### Seis partidos en 18 días: ¿Aguantará el plantel del Rojo?
Al Rojo se le viene una seguidilla infernal: Riestra, Atlético Tucumán, Central, Boston River, octavos del Apertura y de nuevo Guaraní. Seis partidos en 18 días, un fixture digno del Mundial, que obligará a Vaccari a rotar el equipo para no terminar con los jugadores fundidos como el Burrito Ortega en un superclásico. Lomónaco y Valdez, la dupla central titular, están con las piernas cargadas y podrían descansar contra Riestra. Franco Paredes y Nicolás Freire se perfilan como reemplazantes, una oportunidad para demostrar que están a la altura de las circunstancias.
La ilusión intacta: el mensaje del vestuario
«Nos quedan tres partidos en la Copa y hay que ir a ganarlos. Guaraní sacó ventaja, es cierto, pero si jugamos como sabemos hacerlo podemos clasificar”, afirmó Lomónaco, con un optimismo que contagia. «La ilusión está intacta», remarcó el defensor, haciendo eco del mensaje del cuerpo técnico. «Al hincha le digo que siga creyendo. Que no se rinda, porque nosotros no nos vamos a rendir”. ¿Logrará el Rojo la hazaña o se quedará con las manos vacías? El tiempo, como siempre, dirá.
