En el marco del legajo MPF-SJ-11517-2025, la Unidad Fiscal de Delitos contra la Propiedad acordó una pena de prisión condicional para Diego Armando Guarneri (42), quien fue acusado por ocasionar lesiones graves con una cadena de moto durante una pelea en la vía pública. El hecho ocurrió el 22 de abril de 2025, cerca de las 21:00 hs, en el departamento Rivadavia.
Según la investigación dirigida por el fiscal Miguel Ángel Gay, con la intervención del ayudante fiscal José Luis Salinas Molina y los auxiliares Federica Hoffmann y Carolina García Torrejón, el incidente se originó a partir de una rencilla previa entre el imputado y la víctima.
Durante el altercado, la víctima también denunció la sustracción de dinero, aunque esta acusación fue descartada por el Ministerio Público Fiscal. Dos testimonios vecinales coincidieron en que no hubo robo, lo que motivó la recalificación legal del hecho exclusivamente como lesiones graves.
Juicio abreviado y reglas de conducta
El 1 de julio de 2025, a las 10:00 hs, Guarneri acordó con la fiscalía la aplicación del instituto de juicio abreviado, aceptando la responsabilidad en los hechos. En consecuencia, fue condenado a la pena de un (1) año de prisión de cumplimiento condicional, por el delito de lesiones graves.
Además de la pena condicional, se le impusieron reglas de conducta conforme lo establece el artículo 27 bis del Código Penal, cuyo cumplimiento será supervisado por la autoridad judicial competente.
Un hombre fue condenado a un año de prisión condicional por ocasionar lesiones graves con una cadena de moto en una pelea ocurrida en Rivadavia. La Fiscalía descartó el robo denunciado inicialmente, tras testimonios que lo contradijeron. El imputado aceptó la condena en juicio abreviado y deberá cumplir reglas de conducta.
Este contenido es generado automáticamente con IA
Zappo te lo cuenta
En la trama barrial de Rivadavia, donde los rencores viejos se cuecen a fuego lento y las discusiones pueden escalar con la precisión de una telenovela, Diego Armando Guarneri (42) protagonizó una escena digna de película clase B: cadena de moto en mano, ajustó cuentas con un conocido, dejando como saldo lesiones graves y una causa penal.
La noche del 22 de abril no pintaba para tanto dramatismo, pero Guarneri decidió que era momento de reactivar una rencilla añeja con la sutileza de un mamporro bien dirigido. Mientras las cadenas habitualmente sirven para asegurar motos, él la usó para asegurar su lugar en el banquillo. El episodio terminó con el otro hombre lesionado y la versión, poco creíble, de que además le había robado plata en plena pelea.
La fiscalía investigó y dos vecinos tiraron por tierra la teoría del hurto, describiendo más bien una riña con intensidad, pero sin “botín”. Así, el Ministerio Público ajustó el tipo penal a lesiones graves y propuso un juicio abreviado. Guarneri aceptó la jugada: un año de prisión condicional, sin ir a la sombra, pero con reglas de conducta que, si cumple, evitarán que vuelva a empuñar cadenas.
La justicia, en este caso, resolvió con eficacia un conflicto que arrancó a los golpes y terminó con firma y sentencia. Porque, en definitiva, el sistema penal también necesita treguas, aunque vengan sin reconciliación.
Este contenido humorístico es generado por IA y puede contener imprecisiones o ser imprudente, se recomienda leer con discreción.
