Manuel Adorni, vocero presidencial, confirmó que el Poder Ejecutivo presentó una denuncia ante la Justicia Federal por una presunta operación de inteligencia que incluyó la grabación y difusión de conversaciones privadas de la Secretaria General de la Presidencia, Karina Milei.
Una denuncia con tono de guerra política
Este lunes, el Gobierno nacional confirmó que se presentó ante la Justicia Federal tras la aparición de audios atribuidos a Karina Milei. Según el comunicado difundido por Manuel Adorni, las grabaciones fueron realizadas de forma ilegal y manipuladas con fines desestabilizadores.
“Se grabaron conversaciones privadas de Karina Milei y otros funcionarios, las que fueron manipuladas y difundidas para condicionar al Poder Ejecutivo. No fue una filtración. Fue un ataque ilegal, planificado y dirigido”, escribió Adorni en redes sociales.
La denuncia se enmarca en un clima político agitado, a pocos días de las elecciones legislativas, y luego del escándalo generado por los audios de Diego Spagnuolo, exfuncionario de la ANDIS, quien había denunciado presuntos sobornos en el organismo.
Campaña bajo fuego cruzado
La aparición de estos audios se da en un momento de alta sensibilidad para el oficialismo, que también lidia con internas, denuncias cruzadas y una oposición que busca capitalizar cada tropiezo del Gobierno.
Desde el oficialismo remarcaron que se trata de una estrategia para dañar la imagen de Karina Milei, figura clave del círculo presidencial, y para interferir en el proceso electoral.
Por ahora, no se conocen los detalles judiciales de la presentación, pero se espera que la causa sume nuevos capítulos en las próximas horas.
Audios, espionaje y operaciones
El viernes pasado comenzaron a circular en redes fragmentos de conversaciones atribuidas a Karina Milei. Aunque desde el Gobierno no confirmaron su autenticidad, sí remarcaron el carácter ilegal de su obtención y la manipulación posterior.
La denuncia por “operación de inteligencia” intenta establecer si hubo participación de estructuras de espionaje, actores políticos o medios digitales en la filtración.
La situación se suma a otros episodios recientes que generaron tensión en la interna oficialista y pusieron en el centro del debate la seguridad de las comunicaciones dentro del Ejecutivo.
En medio de un calendario electoral que no da tregua, el oficialismo apuesta a retomar el control del relato político. La Justicia, ahora, tendrá la palabra.
El Gobierno denunció ante la Justicia Federal una presunta operación de inteligencia tras la difusión de audios de Karina Milei. Según el vocero presidencial Manuel Adorni, se trata de grabaciones ilegales y manipuladas con el objetivo de condicionar al Ejecutivo en plena campaña electoral. La presentación fue realizada este lunes.
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Manuel Adorni, vocero presidencial, confirmó que el Poder Ejecutivo presentó una denuncia ante la Justicia Federal por una presunta operación de inteligencia que incluyó la grabación y difusión de conversaciones privadas de la Secretaria General de la Presidencia, Karina Milei.
Una denuncia con tono de guerra política
Este lunes, el Gobierno nacional confirmó que se presentó ante la Justicia Federal tras la aparición de audios atribuidos a Karina Milei. Según el comunicado difundido por Manuel Adorni, las grabaciones fueron realizadas de forma ilegal y manipuladas con fines desestabilizadores.
“Se grabaron conversaciones privadas de Karina Milei y otros funcionarios, las que fueron manipuladas y difundidas para condicionar al Poder Ejecutivo. No fue una filtración. Fue un ataque ilegal, planificado y dirigido”, escribió Adorni en redes sociales.
La denuncia se enmarca en un clima político agitado, a pocos días de las elecciones legislativas, y luego del escándalo generado por los audios de Diego Spagnuolo, exfuncionario de la ANDIS, quien había denunciado presuntos sobornos en el organismo.
Campaña bajo fuego cruzado
La aparición de estos audios se da en un momento de alta sensibilidad para el oficialismo, que también lidia con internas, denuncias cruzadas y una oposición que busca capitalizar cada tropiezo del Gobierno.
Desde el oficialismo remarcaron que se trata de una estrategia para dañar la imagen de Karina Milei, figura clave del círculo presidencial, y para interferir en el proceso electoral.
Por ahora, no se conocen los detalles judiciales de la presentación, pero se espera que la causa sume nuevos capítulos en las próximas horas.
Audios, espionaje y operaciones
El viernes pasado comenzaron a circular en redes fragmentos de conversaciones atribuidas a Karina Milei. Aunque desde el Gobierno no confirmaron su autenticidad, sí remarcaron el carácter ilegal de su obtención y la manipulación posterior.
La denuncia por “operación de inteligencia” intenta establecer si hubo participación de estructuras de espionaje, actores políticos o medios digitales en la filtración.
La situación se suma a otros episodios recientes que generaron tensión en la interna oficialista y pusieron en el centro del debate la seguridad de las comunicaciones dentro del Ejecutivo.
En medio de un calendario electoral que no da tregua, el oficialismo apuesta a retomar el control del relato político. La Justicia, ahora, tendrá la palabra.