Barras de Nacional de Montevideo, que participaron en la gresca del Ducó, fueron de tenidos en Mataderos mientras observaban el clásico entre Chicago y Chacarita. La interna de la barra de Huracán suma un nuevo capítulo con la intervención de la barra de Independiente y sanciones para los involucrados.
De Parque Patricios a Mataderos: barras de Nacional cayeron en la trampa del clásico
La batalla campal entre facciones de la barra de Huracán en la previa del clásico contra San Lorenzo, tuvo un epílogo inesperado en Mataderos. Barras de Nacional de Montevideo, presentes en el Ducó y partícipes del bochorno, lograron escabullirse inicialmente. Sin embargo, su pasión por los clásicos los delató: reaparecieron este lunes en el estadio de Nueva Chicago para presenciar el duelo contra Chacarita. La policía, cual astuto estratega a lo Bielsa, aprovechó la ocasión y detuvo a ocho integrantes de la barra uruguaya. ¿Se les habrá ocurrido que Mataderos no era Montevideo nomás?
Recordemos que los barras del Bolso y una de las facciones de Huracán ya habían hecho migas antes del partido contra San Lorenzo, compartiendo tribuna durante el encuentro que el Globo ganó 2-0. Una amistad que, al menos para algunos, terminó tras las rejas. Como diría el Bambino Veira: «la pelota no se mancha… pero la popular a veces sí».
La interna de Huracán: una novela con más temporadas que Los Simpson
El quilombo en la barra de Huracán es más viejo que la Bombonera. Tres facciones se disputan el poder: la José C. Paz (liderada por la familia De Respinis), El Pueblito y la de Villa Zavaleta, comandada por el «Gordo Pablo». Este último, en busca de un reparto más equitativo de los beneficios (léase: entradas, asado y vaya a saber qué más), desató una guerra sin cuartel contra los De Respinis. El enfrentamiento llegó a su punto álgido en un partido de Copa Argentina contra Argentinos Juniors con un tiroteo que ni en el Far West.
Incidentes en la previa del clásico: los hinchas de Huracán se trenzaron a golpes de puño
El Rojo se mete en el baile: ¿se viene el Superclásico de las Barras?
Para sumar leña al fuego, el Gordo Pablo pidió ayuda a «Los Dueños de Avellaneda», la barra de Independiente, comandada por Mario Nadalich. ¿El motivo de la alianza? Nadalich, oriundo de Barracas, tiene una buena relación con la facción de Zavaleta. Con este nuevo aliado, la interna de Huracán amenaza con extenderse más allá de Parque Patricios. ¿Se imaginan una final entre la barra del Rojo y la de Huracán? Sería un partido con más tensión que un Boca-River por el descenso.
Mientras tanto, el Comité de Seguridad en el Fútbol aplicó sanciones a 29 barras involucrados en los incidentes del Ducó, prohibiéndoles el ingreso a los estadios por 48 meses. Una medida que, como un penal atajado por el Pato Abbondanzieri en el último minuto, puede calmar las aguas… o solo posponer la tormenta.
