Milton Casco, el eterno comodín de River, demostró que sigue vigente. Ante la imposibilidad de fichar a Lucas Esquivel, el ex Newell’s se mandó una asistencia de lujo para el gol de Colidio, dejando en claro que la banda izquierda tiene un suplente de garantías para el «Huevo» Acuña. Gallardo respira, ¿y los hinchas?
Casco al rescate: ¿River necesita realmente a Esquivel?

Si bien la lesión de Matías Rojas le puso un asterisco a la previa del partido contra Godoy Cruz, la victoria de River ante Independiente dejó una sensación agridulce, como comerse un alfajor de maicena sin dulce de leche. Pero, en medio de la búsqueda de refuerzos, apareció Milton Casco para ponerle algo de sabor a la banda izquierda.
Es que, ante la novela interminable por Lucas Esquivel, el «Muñeco» mandó a la cancha al experimentado lateral para que le diera aire a Marcos Acuña, y el hombre respondió con creces.
«Me pone contento que haya entrado bien. Cuando el equipo lo necesita, él siempre está al pie del cañón, con buena predisposición aunque no siempre participe. Hoy entró con mucha energía», soltó Gallardo en conferencia de prensa, bancando al jugador que supo ser clave en sus mejores equipos.
El ex Gimnasia, que estuvo cerca de volver a su antiguo club en este mercado de pases, jugó los últimos 45 minutos en el Monumental y no desentonó. Cierto es que el Rojo no fue el Bayern Munich, pero Casco cumplió, dejando a más de uno pensando si realmente River necesita gastar una millonada en Esquivel.
La asistencia que encendió el debate
Pero la frutilla del postre llegó sobre el final. Casco, cual Eber Ludueña salvando la ropa, interceptó un pase largo, se la dio a Borja, y luego, con una pirueta digna de un Cirque du Soleil, asistió a Facundo Colidio para que el delantero marque su doblete y sentencie el partido.
La asistencia de Casco para el doblete de Colidio
¿Casualidad o causalidad? Lo cierto es que Casco cumplió y dejó a más de uno pensando si la inversión en Esquivel es realmente necesaria.
Mercado de pases caliente: ¿Esquivel llegará al Millonario?
Mientras tanto, Lucas Esquivel se entrena diferenciado en Athletico Paranaense, esperando que los popes de River se pongan de acuerdo con los brasileros. Las negociaciones, dignas de un culebrón venezolano, se dilatan y cada vez parece más difícil que el lateral zurdo se ponga la banda roja.

¿Será que River se guarda la plata para otro refuerzo? ¿O Gallardo confía en que Casco puede bancar la parada? El tiempo dirá, pero por ahora, el «todoterreno» demostró que sigue siendo una pieza valiosa en el esquema del «Muñeco».