Ricardo Centurión firmó con Oriente Petrolero de Bolivia, pero su debut está en veremos por problemas con el cupo de extranjeros y el cierre del libro de pases. Mientras tanto, el club atraviesa una crisis institucional y económica. A pesar de todo, Ricky promete «dejar huella».
¿Centurión a lo Riquelme en Bolivia? Ricky firmó, pero Oriente Petrolero no sabe cómo hacerlo jugar
Ricardo Centurión ya puso la firma en Oriente Petrolero, pero su debut con la camiseta verdolaga parece más lejano que la clasificación de Huracán a la Libertadores. El ex Racing y Boca llegó a Bolivia con bombos y platillos, recibido como si fuera el mismísimo Diego – ojo, Maradona, no Latorre – pero la realidad es que el club boliviano tiene un problemón: el libro de pases está cerrado y ya tienen el cupo de extranjeros completo… como si quisieran armar un Dream Team con jugadores del ascenso argentino.

Mientras tanto, Ricky, con la confianza que lo caracteriza – algunos dirían “caradurez” –, declaró: «Estoy muy contento… Agradecido primero al pueblo boliviano». Parece que Centurión se aprendió el manual del discurso políticamente correcto, veremos cuánto le dura. La situación es tan complicada que hasta el asesor legal del club había advertido que ficharlo era «boicotear a la institución». ¿Se imaginan a Mostaza Merlo diciendo algo así? Imposible.
Oriente Petrolero: Un club con más problemas que soluciones
Para colmo de males, Oriente Petrolero está sumergido en una crisis institucional y económica digna de un reality show. Deudas con jugadores, demandas a la FIFA – parece que ni el TAS los salva – y la suspensión del presidente, Ronald Raldes, ex defensor de Colón, pintan un panorama más oscuro que la camiseta de Chacarita. En este contexto, la llegada de Centurión parece una apuesta más arriesgada que un penal de Palermo en una final.
El recibimiento: De película (de Olmedo y Porcel)
A pesar del caos, la llegada de Ricky fue una fiesta. Lo recibieron como si fuera Mick Jagger – aunque con menos glamour y más cumbia – hasta el Ministro del Interior boliviano, hincha de Oriente, le dio la bienvenida. Ricky, como buen rockstar – o villero, según se lo mire – se paró con los hinchas y hasta fue a ver un amistoso. ¿Habrá aprendido algo de Bielsa en su paso por Newell’s? Lo dudamos.
Centurión se paró con los hinchas de Oriente Petrolero que lo recibieron en Bolivia

Centurión, que no juega desde el 2023 en Barracas Central – algunos dicen que estaba entrenando con el equipo de metegol del barrio –, aseguró que en 10 o 12 días está para jugar. Habrá que ver si para entonces Oriente Petrolero resolvió el pequeño detalle de cómo habilitarlo. ¿Logrará Ricky «dejar huella» en Bolivia o será otro capítulo más en su novela tragicómica? El tiempo, y la AFA, dirán.