El clásico platense entre Estudiantes y Gimnasia se jugará con un operativo de seguridad reforzado tras el reciente enfrentamiento entre las barras en el hospital San Roque de Gonnet. La tensión aumentó luego de una provocación en redes sociales del líder de la barra del Lobo, Cristian «Volador» Camillieri, y la posible vuelta de «Los Legendarios» a la tribuna de Estudiantes.
Se viene el clásico platense: ¿partido o batalla campal?
El primer clásico platense post tiroteo en el hospital San Roque de Gonnet se jugará en un clima más tenso que final de Libertadores con VAR dudoso. Recordemos que, si bien el enfrentamiento no fue por temas de tribuna sino sindicales, involucró a la cúpula de las barras de Estudiantes y Gimnasia, poniendo a La Plata en alerta máxima. Y como para no perder la costumbre, en las últimas horas el «Volador» Camillieri, capo de la barra del Lobo, tiró más nafta al fuego con una foto en redes sociales junto a familiares de Raúl «la Morsa» Montero y el «Hache» Alonso, históricos barras de Estudiantes conocidos como «Los Legendarios», con el sugestivo mensaje: “En breve cancha”. ¿Se imaginan a Mostaza Merlo comentando esta situación?
¿Vuelven «Los Legendarios» al Bosque?
La vuelta de «Los Legendarios» a la tribuna pincha es más difícil que hacerle un caño a Redondo en sus mejores épocas. Si bien el «General» Tobar, actual líder de la barra de Estudiantes, está preso por el incidente en el hospital, su hermano Miguel y el «Gato» Socio siguen manejando la popular con el aparente apoyo de la dirigencia y la policía. Pareciera que la seguridad privada del estadio la maneja la familia Tobar… ¿Les suena a algo esto? La Aprevide ya tiene en la mira a Héctor Casado, Sebastián Talerico y Daniel Binci, los supuestos nuevos líderes de «Los Legendarios», y los seguirá de cerca, no solo el domingo, sino cada vez que se acerquen al estadio. Recordemos que del lado del León, además del «General» Tobar, están en cana sus hijos Rodrigo y Santiago, Emiliano D’Amico (ex ladero de la «Caverna» Godoy en Boca) y otros pesados de la barra.
El operativo: más policías que hinchas
Del lado del Lobo, el «Volador» Camillieri, que zafó de milagro del ataque en el hospital, tiene derecho de admisión y no podrá entrar a la cancha. Pero maneja todo desde afuera, como un Bielsa dirigiendo por teléfono. Tres de sus secuaces también están presos por agarrar a las piñas a la policía e intentar robarles las armas después del enfrentamiento en el hospital. Con este panorama, el Aprevide desplegará 730 efectivos para el domingo, en un operativo digno de película de Hollywood. No habrá venta de entradas y solo podrán entrar socios de Gimnasia con la cuota al día. Además, Tribuna Segura estará presente para controlar que ningún barra con derecho de admisión se cuele. Después de Gonnet, 15 barras de ambos clubes terminaron en la lista negra. ¿Será suficiente para que el clásico sea una fiesta de fútbol y no una guerra?
