Franco Colapinto mete presión desde boxes: será piloto reserva en los dos primeros Grandes Premios de la Fórmula 1. Mientras tanto, en Alpine lo tienen a él y a Jack Doohan juntitos, como los guantes de boxeo de Rocky Balboa, para que la rivalidad siga picante.
Colapinto, el comodín de lujo: presente en los dos primeros GP de la F1
En la previa del arranque de la Fórmula 1, la escudería Alpine parece haber encontrado la fórmula secreta para mantener la llama de la rivalidad bien encendida: tener a Franco Colapinto y Jack Doohan a codazos en el box. El argentino, con lugar asegurado en los Grandes Premios de Australia y China como piloto reserva, estará más cerca que nunca de la acción, esperando su oportunidad como un «9» con olfato de gol en el área chica.

Según Motorsport, Colapinto se quedará en el corazón del equipo, aunque Doohan tiene contrato para las primeras cinco carreras. Pierre Gasly completa la dupla titular de Alpine, pero la presencia del marplatense promete ser un condimento extra. La escudería francesa parece apostar a una estrategia similar a la de Bilardo en el Mundial 86: tener un revulsivo en el banco, listo para entrar y cambiar el partido.
Si bien Colapinto insiste en que su rol es apoyar a sus compañeros (como buen jugador de equipo), la convivencia con Doohan en el box promete ser más explosiva que un Boca-River con público visitante. La cercanía entre ambos, compitiendo por un mismo asiento, genera una tensión digna de un thriller psicológico. ¿Se bancarán la presión o terminarán a las piñas como el Beto Alonso y el Mono Navarro Montoya?
Alpine calienta motores (sin sus pilotos titulares) en Bahrein
Mientras tanto, Alpine realizó pruebas en Bahrein con Paul Aron y Ryo Hirakawa, probando los neumáticos Pirelli para 2026. Ni Gasly, ni Doohan, ni Colapinto participaron de estos ensayos. ¿Se habrán quedado afuera para no romper nada antes de tiempo? Aron y Hirakawa completaron más de 130 vueltas cada uno, con tiempos similares que demuestran un nivel parejo…. o que quizás, con los titulares, la cosa hubiera sido otra. Es como jugar un amistoso con la reserva antes de la Copa Libertadores: sirve para probar jugadores, pero la verdadera medida se toma en la cancha.
¿Será 2025 el año de Colapinto en la F1?
La pregunta del millón sigue flotando en el aire. Con la presión de Doohan, la cercanía al equipo titular y la incertidumbre de un futuro que se escribe vuelta a vuelta, Colapinto se juega sus chances de llegar a la máxima categoría. ¿Tendrá la garra de un Palermo para aprovechar la oportunidad o quedará en la puerta como el Burrito Ortega en el 2002? Solo el tiempo lo dirá, pero lo que es seguro es que este culebrón recién comienza.