Aldosivi sorprendió a Estudiantes en un partido para el infarto

¡Quién lo diría! Cuando todos daban por muerto al Tiburón, apareció para morder al León. Aldosivi, en una temporada para el olvido, le propinó una derrota inesperada a Estudiantes de La Plata, que venía con la moral por las nubes. El partido, disputado en el Minella, dejó a más de uno con la boca abierta.

Aldosivi llegaba golpeado, con la soga al cuello y la imperiosa necesidad de sumar de a tres para alimentar la esperanza de la permanencia. Estudiantes, por su parte, venía de una serie de buenos resultados y se perfilaba como un rival de temer. Pero el fútbol, señores, es así de impredecible.

Desde el pitazo inicial, se vio un Aldosivi con otra actitud, con ganas de demostrar que todavía tiene algo que decir en este campeonato. Presión alta, intensidad en la marca y búsqueda constante del arco rival fueron las claves del equipo marplatense.

Estudiantes, por su parte, no encontró su juego y se vio sorprendido por el planteo de su rival. Las individualidades no aparecieron y el equipo, en general, no rindió al nivel esperado. ¿Exceso de confianza, cansancio acumulado? Las respuestas, seguramente, las estará buscando Zielinski.

El gol que desató la locura en el puerto

El gol de Aldosivi llegó como un baldazo de agua fría para Estudiantes y como un grito de esperanza para los hinchas del Tiburón. Una jugada elaborada, un centro preciso y un cabezazo certero que se metió en el fondo de la red. ¡Golazo! El Minella explotó y los jugadores se fundieron en un abrazo interminable.

A partir de ahí, Aldosivi se replegó y defendió con uñas y dientes la ventaja, mientras que Estudiantes se lanzó al ataque con más empuje que ideas. El partido se hizo de ida y vuelta, con emociones constantes y un final no apto para cardíacos.

¿Un triunfo que ilusiona o solo un oasis?

La victoria de Aldosivi ante Estudiantes genera una gran interrogante: ¿será este el punto de inflexión que necesita el equipo para revertir su situación, o solo un espejismo en medio del desierto? La respuesta, como siempre, la dará el tiempo.

Lo cierto es que el triunfo le da un respiro al Tiburón y le permite alimentar la ilusión de la permanencia. Sin embargo, el camino es largo y empedrado, y Aldosivi deberá demostrar que este no fue solo un partido aislado, sino el inicio de una nueva etapa. Claro, como diria Mostaza Merlo, «Paso a paso».

En el mundo del fútbol, como en la vida, nada está escrito. Y Aldosivi, con este triunfo inesperado, nos recuerda una vez más que la esperanza es lo último que se pierde. ¿Dará pelea hasta el final? ¡El tiempo dirá!

Fuente: Diario