Argentinos Juniors, con la conducción de Nicolás Diez, llegó a nueve partidos invictos y alcanzó la cima de la Zona A. El Bicho igualó una marca histórica del club que no se veía desde 1985 y Diez se metió en el podio de los técnicos debutantes con mejor arranque.
El Bicho de la Paternal está que arde. Con un triunfo agónico ante Banfield en el Sur, Argentinos Juniors llegó a los nueve partidos sin conocer la derrota y se trepó a la punta de la Zona A del Torneo Apertura 2025. ¿Un arranque de campeonato así se veía en La Paternal? Para encontrar algo similar hay que remontarse a la época de Yudica, un equipo que metía miedo.
Un invicto con sabor a historia
La racha del equipo dirigido por Nicolás Diez no es casualidad. Seis victorias y tres empates, con 11 goles a favor y apenas cuatro en contra, pintan un panorama alentador. Un dato que no es menor: Argentinos mantuvo la valla invicta en seis encuentros. ¡Casi un De Paul en el arco! Este invicto de nueve fechas iguala una marca histórica del club que no se veía desde el Nacional de 1985, donde el Bicho, con otro equipazo, también hilvanó cinco triunfos y cuatro empates en las primeras nueve jornadas. Para los memoriosos, hay que recordar que solo en otras tres ocasiones Argentinos logró mantenerse invicto durante las primeras nueve fechas: en los Nacionales de 1983 y 1984, y en el torneo de 1960. ¡Casi como meter un gol de tiro libre desde la mitad de la cancha!
Diez, entre los grandes
Y si hablamos de récords, no podemos dejar de mencionar a Nicolás Diez. El técnico debutante se metió en el selecto grupo de entrenadores con mejor comienzo en la historia de Argentinos. Con un 77% de efectividad, Diez solo es superado por Eduardo Correa, el DT del invicto del ’60 (85%). Deja atrás a nombres como José Yudica, que en el ’85 obtuvo un 70%. ¿Será que estamos ante un nuevo Menotti? El tiempo dirá…
La palabra del DT: «Fuimos justos ganadores»
Tras el partido, Nicolás Diez enfrentó los micrófonos con la tranquilidad del que sabe que hizo bien las cosas. «Teníamos que ser nosotros mismos», arrancó el técnico, con una frase que bien podría haber dicho el Bambino Veira. «Sentí que no éramos nosotros. Desde el juego, si lo ubicábamos bien le íbamos a ganar a Banfield», agregó, reconociendo la capacidad de reacción de su equipo en el complemento. «Está bueno vivir estas adversidades, el equipo entendió que había que cambiar el chip”, remarcó Diez, destacando la personalidad del plantel. Para cerrar, y con la humildad de un campeón como el Muñeco Gallardo, Diez afirmó: «Está claro que hay que mantener la humildad. Encontramos un equilibrio y me pone contento que hoy nos hayamos levantado. Fuimos justos ganadores”.