Felipe Melo, con la sangre hirviendo como si hubiera jugado los 90 minutos, analizó sin anestesia la eliminación de Boca de la Libertadores. Bancó a Román, le tiró flores a Cavani (a pesar del gol errado) y cuestionó el laburo de Gago. ¡Para alquilar balcones!
Felipe Melo, el brasileño que parece más bostero que el Bambino Veira, se descargó con todo tras la eliminación de Boca en la Libertadores. El ex volante, que ya colgó los botines pero no la pasión, siguió el partido contra Alianza Lima vía Instagram como un hincha más, comentando cada jugada con el corazón en la boca. Después del papelón, abrió un vivo para responder preguntas y dejó varias perlitas que retumbaron como un bombazo de Palermo en el travesaño.
Banca a Román y palito para Gago
El Pitbull, fiel a su estilo, no se guardó nada. Primero, salió a bancar a Riquelme, el ídolo máximo Xeneize y actual vice, de las críticas por el flojo presente del equipo. «Riquelme está haciendo lo que puede. Boca no está en su mejor momento financiero», tiró, como defendiendo a un compañero de equipo ante una patada artera.
Después, habló de Cavani, el refuerzo estrella que falló un gol increíble. «Erró un gol que no podía errar, sí. Pero para mí sigue siendo un top player», afirmó Melo, recordándonos a Mostaza Merlo y sus frases célebres. Y agregó, con una mezcla de bronca y resignación: «Yo me quedé muy triste, como si hubiera perdido la final del mundo. Hay que poner la cara, como hacía yo cuando era capitán».
Pero el plato fuerte llegó cuando le preguntaron por Gago, el técnico cuestionado. Ahí, Melo sacó a relucir su faceta más polémica, como si fuera el Chavo Fucks entrando a la cancha con los tapones de punta. «Gago puede ser un buen entrenador, es joven… más joven que yo, bah. Pero está claro que el trabajo en Boca… no digo que es malo, pero esperaba mucho más. Un equipo como Boca no puede quedar afuera de la Pre Libertadores, ¡y menos en la Bombonera!», sentenció, con un tono que hubiera hecho sonrojar al mismísimo Vignolo.
«El presidente no puede entrar a hacer goles»
En una frase que quedará para el recuerdo, Melo defendió a Román de las críticas más feroces: “El presidente no puede entrar a la cancha a hacer goles”, cerrando el debate con la contundencia de un cabezazo de Samuel. Parecía estar viendo los fantasmas de partidos pasados, como si el Beto Alonso lo estuviera gambeteando en el área chica.
El brasileño, que viene de ganarle la final de la Libertadores 2023 a Boca con Fluminense, dejó en claro que su amor por el Xeneize no le impide ser crítico. ¿Se imaginan a Felipe Melo comentando un Superclásico con el Bambino Veira? Sería un show digno de Tinelli.