Independiente volvió a perder, esta vez contra Godoy Cruz en Mendoza. El Rojo jugó mal y se hunde cada vez más en la tabla. Zielinski en la cuerda floja.
El Rojo se comió otro papelón en Mendoza
Independiente no levanta cabeza. Ayer, en el estadio Malvinas Argentinas, Godoy Cruz le dio un baile y lo venció por 2 a 0. El equipo de Zielinski jugó un partido flojo, sin ideas y con poca actitud. La derrota lo deja en una situación complicada en la tabla y la continuidad del entrenador está en duda. ¿Será este el final del ciclo del Ruso?
¿Se va el Ruso? La paciencia se agota en Avellaneda
El Tomba fue superior de principio a fin. Con un juego simple pero efectivo, controló el partido y aprovechó las falencias defensivas del Rojo. Los goles llegaron en el segundo tiempo, pero la diferencia pudo haber sido mayor. Independiente, por su parte, apenas inquietó al arquero rival y mostró una preocupante falta de ideas en ataque. Parecía que jugaban con la camiseta de Atlanta, un desastre.
Algunos hinchas, presentes en Mendoza, expresaron su descontento con el rendimiento del equipo y con el DT. Los cantos contra Zielinski y los jugadores se hicieron sentir durante todo el segundo tiempo. La situación es tensa en Avellaneda y la derrota ante Godoy Cruz podría ser el punto final del ciclo del Ruso. Como dijo el Bambino Veira, “el fútbol es así, a veces se gana y a veces se pierde”, pero en Independiente parece que solo se pierde.
Un equipo sin rumbo
Independiente no encuentra el camino. La llegada de Zielinski no generó el cambio esperado y el equipo sigue sin mostrar una identidad de juego. Los refuerzos no rindieron lo esperado y algunos jugadores históricos parecen estar en un nivel muy bajo. La defensa es un flanco débil y el ataque no genera peligro. ¿Habrá tiempo para revertir esta situación o el Rojo se encamina a un nuevo fracaso? Este equipo necesita un 9 como el Bati, alguien que la meta de todos lados.
"Estamos en un momento difícil, pero tenemos que seguir trabajando", declaró Zielinski tras la derrota. El DT reconoció el mal rendimiento del equipo, pero confía en poder revertir la situación. Sin embargo, la paciencia de los hinchas se agota y la presión sobre el entrenador cada vez es mayor. ¿Se le viene la noche al Ruso?
Créditos: Adaptación periodística basada en la nota original de .
