Independiente empató sin goles contra Riestra y en Avellaneda se escuchó el murmullo de la gente. Vaccari, DT del Rojo, bancó a sus jugadores pero reconoció que hay cosas por mejorar. Preocupación por las posibles lesiones de Galdames y Ávalos.
El Rojo empató sin goles con Riestra en el Libertadores de América y la bronca se sintió hasta en el palco. Un partido chivo, trabado, con Riestra metiendo como si fuera la final del mundo, y el Rojo, con más ganas que fútbol champagne, no pudo romper el cero. Situaciones claras hubo, pero faltó la puntada final, esa que te define un partido y te deja tranquilo. Parecía que jugábamos con 10 hasta con 11, ¿Vieron a alguno haciendo la Gran Bochini? No, ni cerca.
Vaccari: entre la autocrítica y el aliento
Julio Vaccari, el técnico del Rojo, como buen estratega, salió a bancar a los pibes. «No se nos dio el resultado que estábamos esperando, pero yo trato de demostrarles a los jugadores lo bueno que están haciendo y que estén tranquilos con su crecimiento. Tratamos de ser superiores a los rivales y vamos a buscarlo», tiró el DT, con una mezcla de resignación y optimismo, tipo Mostaza Merlo después de un clásico perdido.
Reconoció que todavía falta aceitar algunas piezas, pero bancó a muerte la entrega del equipo, que por lo menos, metió hasta el final, aunque a veces parecía que jugaban con ojotas. «Tenemos cositas para mejorar, pero día a día lo seguimos haciendo», dijo Vaccari, con la esperanza de que el equipo llegue con nafta en el tanque para los playoffs. Recordemos que se viene una seguidilla infernal, digna de un pretemporada con Bielsa, seis partidos en 18 días, entre torneo local y Copa Sudamericana. «En lo físico lo vi muy bien al equipo… Pero esta seguidilla de partidos que tenemos es algo atípico», comentó Vaccari.
El arbitraje, la pierna fuerte y las lesiones: un combo explosivo
El arbitraje de Pablo Echavarría también dio que hablar. Para Vaccari, el juez fue demasiado permisivo con la pierna fuerte de Riestra, que por momentos parecía que estaban jugando al rugby en vez de al fútbol. «No hablo de la jugada del final, pero sí del juego, que lo cortaron mucho con infracciones», se quejó el DT, con la diplomacia de un Bilardo en conferencia de prensa. La roja a Cabral, por un pisotón que vio hasta Stevie Wonder, calentó aún más los ánimos.
Y como si fuera poco, dos posibles lesiones musculares, la de Pablo Galdames y la del Tanque Ávalos, encendieron las alarmas en el cuerpo técnico. «Creo que lo de los dos fueron lesiones musculares», confirmó Vaccari, con la cara de un Palermo errando un penal en un Mundial. Se viene Tucumán en la semana y el Rojo necesita a todos con los botines puestos.
El resumen del partido
¿Se viene el batacazo o seguimos en la misma?
El Rojo necesita ganar, y ganar ya. El empate contra Riestra dejó un sabor amargo, tipo mate lavado. La gente está impaciente, y con razón. ¿Alcanzará con la garra y el corazón? ¿O necesitamos un poco más de magia, tipo Messi en el Barcelona? El tiempo dirá. Lo que está claro es que este equipo tiene que despertar si quiere pelear por algo grande. Sino, vamos a terminar como el Bambino Veira en el banco de Racing, puteando para adentro.