Independiente y Godoy Cruz empataron sin goles en Avellaneda, en un partido flojo donde el Rojo mereció un poco más pero no supo concretar. El Tomba se plantó bien en defensa y le complicó la vida al local.
Un cero a cero con gusto a poco en el Libertadores de América
Independiente y Godoy Cruz igualaron 0 a 0 en un partido chato, trabado y con pocas emociones. El Rojo, con la obligación de ganar, fue un poco más que el Tomba pero careció de ideas y profundidad para romper el cero. Los mendocinos, bien parados en defensa, se llevaron un punto valioso de Avellaneda.
El Rojo, con más ganas que fútbol
Desde el arranque, Independiente intentó tomar la iniciativa pero se encontró con un Godoy Cruz ordenado y dispuesto a cortar los circuitos de juego del local. El equipo de Zielinski, con más empuje que fútbol, buscó llegar al arco rival con centros y pelotazos, pero la defensa del Tomba se mostró sólida y despejó cada intento. Faltó ese toque de magia, esa gambeta endiablada que te destraba un partido, algo así como lo que hacía el Beto Alonso en sus épocas mozas.
Godoy Cruz, la muralla mendocina
El equipo de Diego Flores planteó un partido inteligente, apostando al contragolpe y a la solidez defensiva. El Tomba supo aguantar los embates del Rojo y generó algunas situaciones de peligro en la contra, aunque sin la precisión necesaria para convertir. Parecía que tenían a Fillol en el arco, ¡impenetrables!
Un empate que no le sirve a nadie
El 0 a 0 final dejó un sabor amargo para ambos equipos. Independiente, que necesitaba sumar de a tres para acercarse a los puestos de arriba, sigue sin encontrar el rumbo y se aleja de la pelea. Godoy Cruz, por su parte, sumó un punto que lo mantiene en la mitad de la tabla, pero que no le permite acercarse a los puestos de clasificación a las copas. ¿Será que ambos equipos se conformaron con el empate? Uno se pregunta si realmente salieron a buscar el partido o si jugaron al estilo «la nuestra». Como diría el Bambino Veira, «el fútbol es dinámica de lo impensado», pero acá lo impensado fue que no pasó nada.
¿Faltó actitud o faltó fútbol?
El partido dejó más dudas que certezas. ¿Fue falta de actitud de los jugadores o simplemente un mal día? ¿Les faltó fútbol o se encontraron con un rival muy bien parado? El debate queda abierto para los hinchas. Lo que está claro es que este Independiente no convence y necesita mejorar mucho si quiere pelear por algo importante.