En Argentina, el 83,3% de los técnicos de la Liga Profesional lleva menos de un año en el cargo, una muestra de la inestabilidad que se vive en los bancos de suplentes del fútbol local. A nivel mundial, la Liga Profesional se ubica en el puesto 14 del ranking de ligas con mayor rotación de entrenadores.
El fútbol argentino, una silla eléctrica para los directores técnicos
En el mundo del fútbol actual, donde todo se mueve a la velocidad de la luz, la paciencia parece ser una virtud en extinción, sobre todo si hablamos de los entrenadores. Un estudio del Observatorio de Fútbol del CIES reveló que el 66,5% de los técnicos a nivel mundial duran menos de un año en sus puestos… ¡menos que un embarazo! Y sí, el fútbol argentino, como no podía ser de otra manera, está en el ojo de la tormenta.
Argentina, tierra de técnicos efímeros
Según el informe, en nuestra querida Liga Profesional, solo el 17% de los entrenadores actuales superó el año en el cargo. Un dato que nos ubica en el puesto 14 del ranking mundial de inestabilidad en los banquillos. O sea, estamos entre los peores, una especie de «Grupo de la Muerte» para los DT. Si esto fuera un partido, estaríamos perdiendo por goleada, como la selección contra Alemania en el 2006. 83,3% de los DTs con menos de un año… ¡casi como si fueran figuras repetidas del álbum del Mundial!
Para que se den una idea, la Liga Pro de Ecuador lidera este ranking con un impresionante (o deprimente, según cómo se lo mire) 100% de entrenadores con menos de un año en sus funciones. Le siguen Costa Rica, México, Brasil y Colombia… todos con números que asustan más que una patada de Passarella.
El estudio, que fotografió la situación al 15 de abril de 2025, deja en claro que la paciencia de los dirigentes argentinos es más corta que la carrera de Caniggia en el Mundial 90. Y si no, miren lo que pasó en lo que va del torneo: con apenas 13 fechas jugadas, doce técnicos ya fueron despedidos. ¡Una docena! Como si fueran medialunas en la mesa de un asado.
El Kily, último en subirse al tren fantasma de los despedidos
Entre los damnificados por esta “cultura del resultado inmediato” se encuentra el Kily González, quien hace una semana dejó de ser el técnico de Unión. La lista de entrenadores echados es larga y prestigiosa (?), incluyendo nombres como Marcelo Méndez, Walter Erviti, Facundo Sava, y hasta el propio Alexander Medina. Es como si el banco de suplentes fuera una silla eléctrica… ¡y los dirigentes estuvieran ansiosos por apretar el botón!
¿Será que los dirigentes argentinos se creen Bilardo y cambian de técnico como de camisa? ¿O será que los entrenadores actuales son tan malos como el arbitraje en algunos partidos? La respuesta, como la pelota, sigue picando…