07/02/2025 22:43hs.
En un partido que prometía emociones, Huracán venció a Tigre con una jugada que levantó polvareda: un penal cobrado tras una serie de incidentes dignos de la «mano de Dios» de Maradona. ¿Fue justicia divina o un error arbitral garrafal? La polémica está servida.
¡Mamita querida lo que se vivió en el Ducó! Huracán, necesitado como Alfaro Romero de un buen resultado, le ganó a Tigre en un partido que, seamos sinceros, tuvo de todo menos fútbol champagne. Pero claro, como siempre, el folclore del fútbol argentino nos regala perlitas que ni el Chavo del 8 podría haber guionado.
El partido pintaba cerrado, con un 1-0 que dejaba la puerta abierta para cualquiera. Pero a los 33 del segundo tiempo, se armó un tole tole en el área de Tigre que terminó con un penal insólito a favor del Globo. Sí, señores, de esos que hacen hervir la sangre y te acordás de todos los parientes del árbitro.
Todo comenzó con un tiro libre para Huracán. Felipe Zenobio, arquero de Tigre, embolsa la bocha listo para salir jugando rápido. Pero ahí aparece Matko Miljevic, ¡más vivo que Riquelme en un asado!, y se planta delante del arquero, impidiéndole sacar. Hasta ahí, una avivada criolla, de esas que te enseñan en las inferiores.
Pero lo que vino después fue de Ripley. Julián López, viendo la maniobra de Miljevic, agarra al volante de Huracán y lo saca a los empujones para que el arquero pueda despejar. Y ahí, señoras y señores, el árbitro Sebastián Zunino, ¡cobra penal! Miljevic, ni lerdo ni perezoso, se tira al piso como si lo hubiera atropellado un camión. Penal y gol de Huracán. Dos a cero y partido liquidado. ¿O no?
¿Penal o Viveza Criolla? El Debate Está Abierto
La pregunta que nos hacemos todos es: ¿estuvo bien cobrado el penal? Acá es donde se arma el debate, el picado en el bar, la catarsis en Twitter. Porque si bien es cierto que López agarra a Miljevic, primero ocurre la obstrucción del jugador de Huracán a Zenobio. ¡Una avivada que debería haber sido sancionada como falta en ataque!
Pero Zunino no lo vio así. Tal vez interpretó que ambas faltas fueron simultáneas y priorizó la más grave, que es el penal. Pero las imágenes no mienten: la infracción de Miljevic es previa al agarrón de López. ¿Error del árbitro? ¿Falta de criterio? Lo que sí es seguro es que el VAR, mirando el partido desde el palco, no dijo ni mú. ¡Silencio de radio!
Y mientras tanto, el arbitraje argentino sigue en el ojo de la tormenta. Hace poco, se viralizó el escándalo de Luis Lobo Medina, aquel que le convalidó un gol en offside a Barracas Central ante Banfield y se olvidó de sancionar un penal clarísimo a favor del Taladro. ¡Un papelón! Y para colmo, un árbitro del ascenso se le plantó a Federico Beligoy -Director Nacional de Arbitraje- en una reunión por Zoom. ¡Se pudrió todo!
El insólito penal de Julián López a Miljevich.El Análisis del Partido: ¿Un Triunfo Merecido?
Más allá de la polémica arbitral, Huracán consiguió su primer triunfo en el torneo. Y hay que reconocer que el equipo de Frank Kudelka dejó una buena imagen. Después de un comienzo dubitativo, el DT metió mano en el equipo y encontró un funcionamiento que ilusiona a los hinchas del Globo.
El ingreso de Matías Tissera le dio otra dinámica al ataque, y el pibe respondió con un golazo. Además, Gil se mostró enchufado y la conexión con Mazzantti y Alaniz por las bandas fue clave. El primer gol, justamente, nació de una recuperación de Miljevic (sí, el mismo del penal), que habilitó a Alaniz para que metiera un centro perfecto para Tissera.
Pero ojo, que Tigre no se la hizo fácil a Huracán. El equipo de Davobe buscó el empate con insistencia, pero le faltó claridad en los últimos metros. Y para colmo de males, se le lesionaron Mazzantti y Tissera en pocos minutos, lo que obligó a Kudelka a replantear el partido.
En ese momento de zozobra, Tigre apretó contra el arco de Galíndez, pero el arquero respondió con seguridad. Y después, llegó la jugada del penal, que Miljevic cambió por gol para sentenciar el partido y darle una alegría a la gente del Globo. Una victoria que sirve para calmar las aguas en Parque Patricios, pero que deja un sabor agridulce por la polémica arbitral. Al final, como decía el gran Eber Ludueña: «La vida es una milanesa». Y en el fútbol, como en la vida, a veces te toca la más grande y a veces te comes el hueso.
Hernán Galíndez fue una de las figuras del triunfo de Huracán.Fuente: Nota basada en información de .
