Uriel Ojeda, la joya de San Lorenzo, sube a Primera. El pibe de 17 años, figura de la Séptima y con buen rendimiento en el Sudamericano Sub 17, fue pedido por Russo para sumarse al plantel profesional. Ojeda, con una gambeta endiablada y un olfato goleador notable, es la gran promesa del Ciclón.
Ojeda, el nuevo crack del Ciclón, ¿el próximo Pipi Romagnoli?
La rompe en inferiores, la pisa en reserva y ahora… ¡a Primera! Uriel Ojeda, el pibe de 17 años que tiene a Boedo de fiesta, fue promovido al plantel profesional de San Lorenzo por pedido expreso de Miguel Ángel Russo. ¿Será este el nacimiento de una estrella? ¿Tendrá el potrero que le falta a este San Lorenzo deslucido?
Este pibe, salido del baby fútbol del club Las Lomitas de Moreno, llegó al CASLA con edad de infantiles y desde entonces, viene gambeteando rivales y dejando defensores en el camino como si fuera el mismísimo Maradona –guardando las distancias, obvio, que el Diego es uno solo–. Ojeda es un volante creativo con una zurda mágica, capaz de inventar una jugada de la nada y clavarla en el ángulo como si estuviera jugando un picadito con amigos. ¡Un distinto!
De Moreno a la Primera de San Lorenzo: la historia de Uriel Ojeda
En la Séptima del Ciclón, Ojeda fue la figura excluyente, el goleador indiscutido con 21 pepas en la temporada. ¡Un animal! Su talento no pasó desapercibido para Damián Ayude, DT de la Reserva, quien lo tiene como uno de sus jugadores clave. Y como si fuera poco, en el Sudamericano Sub 17 con la Selección Argentina, el pibe demostró que la presión no le pesa: dos goles y dos asistencias lo confirman. Ojeda es de esos jugadores que te hacen acordar al Beto Alonso, con esa gambeta endiablada y esa visión de juego que pocos tienen.
Su actuación con la celeste y blanca no solo llamó la atención de Russo, sino también de los colaboradores de Scaloni. ¿Se imaginan a este pibe en la mayor? Sería como ver a Messi en sus inicios, con esa frescura y esa irreverencia que solo tienen los cracks.
Con contrato hasta 2026 y una cláusula de recisión de 20 millones de dólares, Ojeda es la joya más preciada del Ciclón. Russo, con su ojo clínico, lo vio y no dudó: lo subió a Primera. Por ahora, seguirá alternando con la Reserva, pero su debut en la máxima categoría parece estar más cerca que nunca.
Este fin de semana, Ojeda jugará con la Reserva ante Godoy Cruz. ¿Será su último partido antes del gran salto? En Boedo se ilusionan con este pibe que promete ser el nuevo ídolo. Habrá que ver si tiene la pasta de campeón, si puede aguantar la presión de jugar en Primera y si, como decía el Bambino Veira, «la mueve como un bailarín de tango». El tiempo dirá, pero una cosa es segura: Ojeda tiene todo para triunfar.
