Lanús dejó escapar la victoria en el clásico contra Banfield. Arrancó ganando con un penal polémico de Salvio, pero el Taladro lo empató con un gol de Rivera después de un penal anulado por el VAR. El Grana jugó mal y los hinchas explotaron.
Lanús se pinchó en el clásico: Lo tenía todo, pero terminó empatando con Banfield
El Granate dejó pasar una oportunidad de oro en su propia cancha. Con un Banfield en horas bajas y un penal a favor en el primer tiempo, parecía que la victoria estaba asegurada. Pero como dice el dicho, «partido que empieza ganando, hay que saberlo terminar», y Lanús, a lo Mostaza Merlo, entró en modo ‘paso a paso… suave suavecito’ y se le escapó la tortuga.
Un penal polémico y la jerarquía de Salvio
El primer tiempo fue un monólogo granate, aunque sin demasiada profundidad…a lo Riquelme en sus últimos años. El agarrón de Martín Río sobre Muñoz en el área fue interpretado como penal por Ramírez, una decisión que generó polémica en la tribuna y en los comentaristas… casi como un gol de Palermo con la mano. Pero a Toto Salvio no le tembló el pulso y con una definición a lo «Pato» Fillol, puso el 1-0.
Banfield, más perdido que el Cholo Simeone en una final de Champions, recién tuvo una chance clara en la última jugada del primer tiempo. López García quedó solo frente al arco, pero su definición fue más desviada que un centro de Caruso Lombardi. Una jugada que hizo gritar a más de uno: «¡Noooo, es para Burrito Ortega!».
El Granate se durmió y Banfield lo empató
En el complemento, Lanús se replegó…como si ya fuera campeón. Pellegrino apostó a la mínima diferencia, algo así como Bilardo en el 86, pero la estrategia le salió mal. Banfield, con Alaniz como abanderado, nunca bajó los brazos y con los cambios, sobre todo el ingreso de Esquivel, encontró más frescura…parecía que había tomado la pastilla del Dr. Cormillot, y fue en busca del empate.
En un minuto, el partido se puso patas para arriba. Primero, el árbitro cobró penal para Banfield por una falta de Rivera, pero el VAR, cual ojo de halcón de Wimbledon, lo anuló. Acto seguido, el mismo Rivera, con una asistencia de Alaniz que ni el Bambino Veira hubiera diagramado mejor, puso el 1-1. Banfield siguió buscando el triunfo..a lo Gallardo en los últimos minutos, mientras que Lanús seguía parado…como estatua de museo. El pitazo final desató la furia de la hinchada local, que no le perdonó al equipo la falta de ambición…y a Pellegrino, el planteo mezquino.
El gol de penal de Salvio ante Banfield
Lanús –
El gol de penal de Salvio ante Banfield
El empate de Rivera ante Lanús
Lanús –
