Gastón Martirena, el uruguayo que se convirtió en la pesadilla de los equipos brasileños en la Sudamericana 2024, se prepara para el debut de Racing en la Libertadores contra Fortaleza. Con la confianza a tope, asegura que la Academia se transforma en las copas internacionales y que van a dar pelea.
Martirena, el verdugo de los brasileros, listo para la Libertadores
El delantero uruguayo Gastón Martirena palpitó el debut de Racing en la Copa Libertadores contra Fortaleza. Con la seguridad de un caudillo charrúa y la experiencia de haber sido clave en la conquista de la Sudamericana 2024, el atacante aseguró que la Academia se agranda en las copas.
«En las copas nos transformamos»
“En las copas nos transformamos. Las sabemos jugar, como se tienen que jugar. Nos va a ir bien, tenemos un lindo grupo, hay muchos jugadores de jerarquía que saben jugar este tipo de partidos. Estoy con muchas ganas de poder arrancar ya”, declaró Martirena en diálogo con @awenotv. Una declaración que, sin dudas, infla el pecho del hincha académico y lo ilusiona con una buena actuación en el torneo continental. ¿Será que este año se nos da la gloriosa?
Recordemos que este pibe no es un improvisado en esto de amargar brasileños. En la Sudamericana pasada, Martirena les clavó tres golazos: uno a Cruzeiro en la final (un partido para el recuerdo, como el gol de Bochini a River en el 86′), otro a Athletico Paranaense (un bombazo de afuera del área que todavía lo deben estar buscando) y uno a Corinthians (una obra de arte con caño incluido, al mejor estilo Román).
Goles que valen oro
No solo de Libertadores vive el hombre, y Martirena también se despachó con cinco goles en el torneo local. El último, en el clásico contra Independiente, donde abrió el marcador en un partido que terminó 1-1. Si bien el resultado no fue el ideal, el uruguayo demostró tener la sangre fría de un Palermo en los penales.
«Sé que alguna siempre me va a quedar. Hay que tomarse un tiempo, ver y definir», declaró Martirena luego del clásico, con la humildad de un campeón pero la confianza de un goleador nato.
La Academia necesita un golpe de timón
Racing no viene bien en el Apertura. Una victoria en los últimos siete partidos es un balance preocupante. La derrota ante Independiente Rivadavia dejó al equipo a cuatro puntos de la zona de clasificación. Sin embargo, la Libertadores es otra historia. Es como si la camiseta pesara diferente, como si el equipo se transformara en un Mostaza Merlo en sus mejores épocas. ¿Podrá la Academia cambiar la cara en el torneo continental? El martes, contra Fortaleza, tendremos la primera respuesta.