El Torneo Apertura es una verdadera carnicería de técnicos. Alexander Medina, el último en caer, se suma a una lista que ya acumula 10 entrenadores despedidos antes de finalizar el campeonato. ¿Se viene el Apocalipsis del banquillo?
Se fue el Cacique: Medina es el décimo DT eyectado del Apertura
Arrancamos el Apertura con bombos y platillos, pero a esta altura del campeonato, a falta de varias fechas por jugarse, parece que lo único que suena es el portazo de los directores técnicos. Diez técnicos en once fechas, una estadística que te hace pensar si los dirigentes andan con el gatillo fácil o si realmente el nivel futbolero está más complicado que gambeta en patines. Alexander Medina, el último en sumarse a la lista de los caídos, dejó Talleres después de una racha más negativa que el saldo de mi tarjeta de crédito.
¿Banquillo caliente o fusible quemado? El baile de los técnicos
El Cacique, que nos regaló la Supercopa Internacional (un golazo de media cancha a lo Román, qué momento), no pudo gambetear la malaria de resultados en el torneo local. Una victoria en once partidos es menos que lo que dura un asado con Eber Ludueña. Y en la Copa Argentina, chau chau adiós contra Deportivo Armenio, un resultado que debe haber caído como patada en los dientes. Medina se suma a una lista que ya parece la formación titular de un equipo de fantasmas: Marcelo Méndez (Gimnasia), Walter Erviti (Belgrano), Facundo Sava (Atlético Tucumán), Ernesto Pedernera (Godoy Cruz), Mariano Soso (Newell’s), Sebastián Domínguez (Vélez), Andrés Yllana (Aldosivi), Raúl Antuña (San Martín de San Juan) y el caso especial de Cristian Fabbiani, que dejó Riestra para irse a Newell’s, una movida más astuta que la del Bambino Veira en sus mejores épocas.
«Yo estoy muy fuerte», dijo Medina antes de irse. ¿Autoengaño o táctica maradoniana?
La frase de Medina, "Yo estoy muy fuerte, a pesar de estos últimos resultados que no le gustan a nadie", quedó resonando en el ambiente como un eco burlón. ¿Se la creyó él mismo o era una finta para despistar a la prensa, al estilo Diego? La realidad es que la tabla no miente y los resultados son más fríos que la respuesta de Passarella.
Un torneo que devora entrenadores. ¿Quién será el próximo?
A este ritmo, vamos a necesitar más técnicos que jugadores para terminar el campeonato. El Apertura se convirtió en un torneo que devora entrenadores como si fueran medialunas en la cancha de River. ¿Quién será el próximo en caer? Hagan sus apuestas, señoras y señores, que el show del fútbol argentino recién empieza. Y como diría el Bambino: "el que abandona no tiene premio".
