Nicolás Orsini, el delantero que Boca no quiso largar del todo pero tampoco quería tener, finalmente fue cedido a préstamo a Platense. El Tatengue lo quería, pero el Xeneize lo usaba de moneda de cambio. Mientras tanto, Orsini entrenaba solo, cual Rocky Balboa en Siberia, esperando su oportunidad. ¿Será Platense su lugar en el mundo o terminará como el Bambino Veira en el ascenso?
Tras su paso por Unión de Santa Fe, donde la rompió… bueno, donde jugó, Nicolás Orsini regresó a Boca Juniors. El Tatengue quería retenerlo, pero en el Xeneize lo veían más como parte de una negociación que como un jugador. Orsini, con más goles en Instagram que en el torneo local, tuvo que volver al club de la Ribera.
¿Orsini a Platense? Una novela con más capítulos que «Verano Eterno»
Mientras Boca jugaba contra Central Córdoba en Santiago del Estero, Orsini subía historias a Instagram entrenando por su cuenta en Boca Predio, con la ropa del club. Parecía un mensaje cifrado para Riquelme, tipo «Bochini para Bertoni» pero con menos glamour. Finalmente, sobre el cierre del libro de pases, Platense lo sumó a préstamo por un año. Uno se pregunta: ¿es un refuerzo para el Calamar o Boca le está haciendo un favor? Casi que me la juego a que es un golazo para Platense, un delantero con la garra de Palermo… Bueno, quizás no tanto.
Boca Juniors –
Nicolás Orsini volvió a aparecer en Boca Predio
¿El último baile? La sequía goleadora de Orsini
El último partido oficial de Orsini con la azul y oro fue el 9 de abril de 2023, en una derrota contra Colón. Desde entonces, más frío que banco de suplentes en invierno. Para ser justos, varios clubes se mostraron interesados en él: Lanús, Tigre, Newell’s y hasta el Tenerife de España. Pero ninguna oferta convenció a Boca. Habrá que ver si en Vicente López, Orsini encuentra su revancha y se convierte en el nuevo goleador del Calamar. Ojalá que no termine como Caniggia en Wembley, festejando un gol que no hizo.
