En el inicio del Apertura 2025, el River de Gallardo muestra una preocupante desconexión entre posesión y generación de peligro. A pesar de dominar la tenencia del balón, el equipo carece de desequilibrio en el mediocampo y depende demasiado de un Enzo Pérez marcado de cerca. Los refuerzos no terminan de encajar y la solución podría estar en los juveniles, aunque el Muñeco prefiere darles rodaje de a poco. La pregunta que resuena en Núñez es clara: ¿Cuándo carburará este River?
En el manual del River Plate que soñaba Marcelo Gallardo, ese que nos hizo creer que todo era posible, hay una serie de requisitos que este modelo 2025 no está cumpliendo, ¡ni ahí! Y el problema, como en los grandes equipos, arranca en el mediocampo.
Según nos cuenta en su análisis, el déficit de elaboración de juego es alarmante. Porque, mirá vos, el equipo tiene la pelota un 71% del tiempo, ¡una barbaridad!, pero apenas generó cinco chances claras de gol en tres fechas. ¡Cinco! Sin contar las de pelota parada, claro. ¿Será que tanta posesión es puro verso?

## ¿Dónde está el problema?
La raíz, dicen, está en la falta de sorpresa de los volantes. Enzo Pérez está más marcado que jugador de truco en el conurbano y los demás no logran suplirlo. Galoppo tiene buen pie, pero le falta esa rebeldía para pedir la pelota y encarar. Meza tiene chispazos, pero no es constante.
Y Lanzini, que tendría que ser el distinto, parece que se quedó sin nafta. El 10 necesita ese combustible para acelerar en la zona caliente. Y claro, los años no vienen solos, el físico ya no responde como antes. ¡Qué difícil es envejecer, eh!
Para colmo, llegaron refuerzos de todos lados, pero ninguno tiene la magia del pibe Mastantuono. Aunque, claro, Gallardo prefiere llevarlo de a poco, que no se queme antes de tiempo. ¿Y Nacho Fernández? Y bueno, a los 35 ya no tiene el mismo despliegue. ¿Rojas? Buen pie, pero le falta agresividad. ¿El Pity Martínez? Aportará su magia en los últimos minutos, si el físico lo deja.
## Posesión sin profundidad
Entonces, tanta posesión termina en pases cortos, seguros, más laterales que verticales. Falta esa conexión rápida que descoloque a las defensas rivales. Extrañamos esa rotación constante que proponía Gallardo, esa que volvía locos a los marcadores.
Los delanteros tampoco ayudan mucho. Colidio no termina de explotar, Driussi necesita tiempo para adaptarse y Tapia desperdicia todas las chances. ¡Así es difícil, eh!
Para cerrar, el desafío del Muñeco, según el periodista de , es transformar esa posesión en ataque constante, como en sus viejas épocas. Pero, ¿tendrá que cambiar nombres? ¿O el cambio de esquema ante San Lorenzo fue un paso en falso? La pregunta está en el aire y los hinchas, como Eber Ludueña esperando un penal, aguardan respuestas.
Los dos goles de River en el Apertura 2025
Instituto (Córdoba) –
River le ganó a Instituto por 1 a 0 con un gol agónico de Montiel
River Plate –