Marcelo Moretti, actual presidente de San Lorenzo, presentó los resultados de la auditoría a la gestión anterior, revelando una deuda millonaria y una situación institucional compleja. Exdirigentes salieron al cruce, defendiendo su mandato y cuestionando la gestión actual. Se armó el tole tole en Boedo.
Auditoría en San Lorenzo: ¿Bomba de humo o herencia pesada?
La promesa de campaña de Marcelo Moretti de auditar la gestión anterior en San Lorenzo finalmente se materializó, y como era de esperarse, explotó una bomba en Boedo. El informe reveló una deuda de 30 millones de dólares y 183 juicios, además de derechos de TV comprometidos hasta 2027. Moretti, con una actitud a lo Bilardo en conferencia de prensa, adjuntó fotos del informe en sus redes sociales, disparando munición gruesa contra Matías Lammens, Marcelo Tinelli y Horacio Arreceygor: “Nos dejaron el club como el pasto de la Bombonera después de un recital”.
El comunicado oficial del club, con un tono más diplomático que Mostaza Merlo dirigiendo a un equipo de juveniles, amplió la información: al asumir, el plantel estaba prácticamente desmantelado por falta de pagos. Moretti, cual Palermo en el área, se mostró optimista sobre el futuro, pero la polémica ya estaba instalada.
La contraofensiva de la gestión anterior
Como si fuera un contragolpe de Messi, exdirigentes de la gestión anterior salieron a responder con firmeza. Alejandro Maccio, con un estilo a lo Ruggeri, cuestionó la deuda alegando ingresos millonarios por ventas de jugadores y la clasificación a la Libertadores. Otro exdirigente, en diálogo con (Por: Juan Pablo Méndez), recordó la situación del club en 2012, con un pasivo similar y un plantel reducido, destacando los logros obtenidos durante su mandato: la Copa Libertadores, la inauguración del Polideportivo Pando y la compra de terrenos en Boedo. "Esto es como cuando el Bambino Veira decía que con él, River jugaba con 12. Nosotros dejamos un club campeón, con un proyecto a futuro. Acá hay gato encerrado", sentenció.
La discusión se asemeja a un Superclásico: acusaciones cruzadas, interpretaciones dispares de los números y un clima de tensión que promete nuevos capítulos. La oposición también se sumó al debate, exigiendo transparencia y la investigación de la responsabilidad de todos los involucrados, incluido el propio Moretti. Como diría el Chavo Fucks, esto se va a descontrolar.
¿Qué pasará ahora?
La auditoría será analizada por la Comisión Directiva, la Comisión Fiscalizadora y el Tribunal de Ética, quienes deberán determinar las responsabilidades y tomar las medidas correspondientes. Mientras tanto, la pelota sigue picando en Boedo, pero la incertidumbre sobre el futuro institucional opaca el presente deportivo. ¿Hablarán Lammens y Tinelli? ¿Se llegará a un acuerdo o esto terminará como la final del 2014? Solo el tiempo lo dirá.