San Lorenzo vive un 2025 sin derrotas ni goles en contra. Russo mantiene la base del equipo, pero la duda pasa por Cerutti, quien arrastra una molestia. ¿Arriesgará el técnico pensando en Instituto y, especialmente, en el clásico con Huracán?
Arrancó el año y San Lorenzo parece otro. Cuatro partidos, invicto y con el arco cerrado. Un lujo, dirán algunos. ¡Y cómo no ilusionarse! Miguel Ángel Russo, con la experiencia de un Bilardo dirigiendo, sabe que en Boedo no se pueden dar ventajas. Cada punto vale oro en la carrera por meterse en los playoffs del Torneo Apertura. Este jueves, desde las 20, Platense visita el Nuevo Gasómetro y el Ciclón tiene la obligación de demostrar que este buen momento no es casualidad.
Cerutti, la única duda que mantiene Russo. (Foto: Prensa CASLA).
Con una pretemporada que ilusionó (y vaya si necesitamos ilusiones por estos lados) y un plantel corto pero aguerrido, Russo, fiel a su estilo laburador, no anda con vueltas. Repite nombres, confía en los que están y solo mete mano cuando las lesiones lo obligan. Como diría el gran Mostaza Merlo, «paso a paso».
La primera baja sensible fue la de Iker Muniain. El enganche, llamado a ser el conductor del equipo, se desgarró antes del debut ante Talleres y todavía no pudo mostrar su magia. Se fue a España a recuperarse, esperando volver la semana que viene para el clásico con Huracán. ¡Que se ponga bien, lo necesitamos! Y ahora, antes del partido con Vélez, se sumó la duda de Ezequiel Cerutti. El «Pocho», como le dicen, es la única incógnita que tiene Russo para recibir al Calamar.
Andrés Vombergar se quedará en el 11 en caso de que no juegue Cerutti. (Foto: Prensa San Lorenzo)
## ¿Arriesgar o no arriesgar, he ahí el dilema?
El Pocho, uno de los puntos altos desde la llegada de Russo, renovó contrato a principios de año a pedido del técnico. Russo lo considera clave, un jugador diferente que le da un plus a un equipo plagado de juveniles. La molestia muscular que sintió lo dejó afuera del empate en Liniers y lo obligó a entrenarse diferenciado.
Pero acá viene la pregunta del millón: ¿lo arriesga Russo contra Platense o lo guarda para Instituto y el clásico? Cerutti se movió bien en la práctica del miércoles, demostrando que está para jugar. Pero Russo, con la sabiduría que le dan los años, no quiere apurarse. Sabe que se vienen partidos importantes y no quiere perder a un jugador fundamental por una lesión más grave. Como diría el maestro Eber Ludueña, «a veces, es mejor prevenir que curar».
## El posible 11 del Ciclón
Así las cosas, y a la espera de una decisión final, este sería el probable equipo que pararía Russo el jueves:
**Orlando Gill; Ezequiel Herrera, Jhohan Romaña, Daniel Herrera, Elías Báez; Elián Irala, Nicolás Tripicchio; Alexis Cuello, Matías Reali, Malcom Braida; y Andrés Vombergar. DT: Miguel Ángel Russo.**
¿Será este el equipo que nos dará otra alegría? Lo veremos en la cancha. Lo que sí sabemos es que este San Lorenzo, con Russo a la cabeza, tiene una identidad. Un equipo que labura, que mete y que no se rinde. Y eso, en Boedo, vale más que cualquier figura. ¡Vamos Ciclón, carajo!