Guillermo Tofoni, representante de Foster Gillett en Argentina, aclaró la situación del empresario con Estudiantes y los fallidos pases de Villagra y Gómez. Gillett sigue comprometido con el Pincha, invirtió 20 millones de dólares y la demora en un préstamo generó malentendidos. En los casos de los jugadores, Tofoni afirma que no hubo irregularidades: con Villagra no se firmó nada y con Gómez, Vélez rechazó las garantías ofrecidas.
Tofoni, el manager de Gillett en Argentina, salió a poner los puntos sobre las íes en una charla con Beo Sport. Habló de todo: la relación de Gillett con Estudiantes, las inversiones, y los pases frustrados de Villagra y Gómez que dejaron a más de uno con la boca abierta.
¿Gillett se borró del Pincha? ¡Que la cuenten como quieran!
Parece que algunos andaban diciendo que Gillett se había bajado del barco del Pincha. Pero Tofoni, con la seguridad de un penal pateado por Palermo en el ’99, desmintió todo. «Foster no se borró», aseguró. De hecho, contó que hablan todos los días y que Gillett ya puso 20 millones de verdes sobre la mesa, una muestra de buena fe mientras se resuelve un tema con un préstamo que viene demorando más que un gol de Palermo en la final del 2000 contra Boca. «Parte de la prensa mal informa», tiró Tofoni, dejando la pelota picando en el área chica.
Según Tofoni, la demora en la Asamblea de Estudiantes complicó las cosas. Sin Asamblea, Gillett no tenía obligación de invertir, pero igual puso la guita. Un gesto que, según él, demuestra el compromiso del yanqui con el club. Además, explicó que Gillett manda toda la plata del fútbol a Inglaterra y que por eso el préstamo está tardando más que un lateral de Zanetti en llegar al área. Pero ni bien se destraben los fondos, seguirá invirtiendo en el fútbol argentino. ¡Atajate Catalina que vienen más millones! «Hay otras familias que van a venir a invertir en el país», anticipó Tofoni. Ojo al piojo, que esto recién empieza.
Villagra y Gómez: dos pases que quedaron en la nada misma
El caso de Villagra es como un centro pasado al área chica: no se concretó. Tofoni fue claro: «Foster no debe nada porque no se firmó absolutamente nada». Parece que hubo charlas, se tiraron ideas, pero nunca se llegó a un acuerdo formal. Tofoni lo atribuye a la especulación que se generó con la posible llegada de Gillett al fútbol argentino, que al final no se dio. Quedó todo en veremos, como un tiro libre de Riquelme que se va por arriba del travesaño.
El caso de Gómez es distinto, como un gol de chilena: más complejo. Acá sí hubo contrato firmado, todo ante escribano como la gente. Pero Vélez no aceptó las garantías que ofreció Gillett, que había puesto 10 palos verdes en efectivo y avales por 50 millones. El Fortín quería la plata cash, como si fuera un pase de Crespo a Ortega en el 2002. Y como la transferencia no llegó a tiempo, la operación se pinchó. Tofoni dejó en claro que Gillett tampoco le debe nada a Vélez. Fin de la historia, al menos por ahora…