Giuliano Simeone, en un intento de contraataque digno de Eber Ludueña, se llevó puesto a un juez de línea en el partido Espanyol – Atlético Madrid. El árbitro, cual arquero ante un tiro libre de Messi, terminó patas para arriba, pero se levantó como si nada y siguió laburando. El blooper se viralizó en redes y el partido terminó 1-1.
Giuliano Simeone, el árbitro y una jugada para el recuerdo
En el encuentro entre Espanyol y Atlético Madrid por La Liga, Giuliano Simeone protagonizó una escena que rápidamente se viralizó en redes sociales. El delantero, en una corrida al mejor estilo «el Tanque» Silva pero con menos precisión, intentó un autopase que le quedó largo, y en su afán por alcanzar la pelota, se llevó por delante al juez de línea.
El pobre árbitro, que venía siguiendo la jugada con la atención de un VAR revisando un posible penal, terminó desparramado en el césped, patas para arriba como si lo hubiera sacudido el mismísimo Mostaza Merlo. Sin embargo, demostró una capacidad de reacción admirable, digna de un Francescoli gambeteando en el área: se levantó como si nada hubiera pasado y continuó con el partido. El línea, un verdadero profesional, ni se quejó. Diría el Bambino Veira: «la pelota no se mancha».
Giuliano Simeone chocó con un línea y la imagen se viralizó
¿Un partido de fútbol o una película de Olmedo?
El insólito momento ocurrió a los 15 minutos del segundo tiempo, con el Atlético Madrid ganando 1-0. El Espanyol, sin embargo, logró empatar el partido de penal, dejando al Colchonero tercero en la tabla de posiciones. Más allá del resultado, la imagen del árbitro volando por los aires quedará en la retina de los aficionados. ¿Fue falta de Simeone? ¿El línea se movió a propósito? El debate está abierto. Una cosa es segura: este tipo de jugadas son las que hacen del fútbol un deporte tan apasionante… y a veces, un poco bizarro.
