El Dibu Martínez llegó a Francia con una gorra con la bandera argentina y las cuatro copas ganadas con la Selección, lo que generó revuelo en los medios franceses antes del partido del Aston Villa contra el PSG por Champions League. Se espera un recibimiento hostil por parte de la hinchada francesa, que aún recuerda las actuaciones del Dibu en Qatar y en partidos anteriores.
El Dibu y su gorra: ¿Provocación o simple orgullo argentino?
El Aston Villa aterrizó en Francia para enfrentar al PSG por los cuartos de final de la Champions League. Pero la noticia, como era de esperarse con el Dibu de por medio, no fue la previa del partido, sino la gorra que lució Emiliano Martínez. El arquero argentino apareció con una gorra con la bandera nacional y cuatro estrellas doradas que reemplazaban el clásico sol de mayo, representando, obviamente, las dos Copas Américas, la Finalissima y el Mundial obtenidos con la Selección.
Un Dibu picante en tierras galas
La elección de la gorra no cayó nada bien en Francia, donde los recuerdos del Dibu atajando penales en la final del Mundial y sus posteriores festejos siguen frescos como una ensalada del día. La revista «So Foot» le dedicó un artículo entero, describiendo su mirada como la de «alguien que está a punto de detener un penalti o bailar sobre tu cadáver». El medio Get French Football News fue más directo, calificando al Dibu como «enemigo público número uno» y pronosticando una «recepción hostil» en el Stade Pierre-Mauroy. Como si fuera un Boca-River, pero a nivel selecciones.

Tercera visita, ¿tercera función?
Esta es la tercera vez que el Dibu pisa suelo francés después de Qatar. La primera fue el año pasado por los cuartos de final de la Conference League contra el Lille. El recibimiento fue similar: abucheos, silbidos, el público francés convertido en una orquesta desafinada. Pero el Dibu, con la sangre fría de un ajedrecista, atajó dos penales en la definición y clasificó a su equipo a semifinales. Una actuación digna de un Goycochea moderno. La segunda visita fue en enero de este año contra el Mónaco por la Champions League. El clima fue caldeado, pero la victoria fue para los locales.
¿Cómo será recibido esta vez el Dibu? ¿Responderá a las provocaciones? ¿O se enfocará en tapar todo como si fuera el Pato Fillol en sus mejores épocas? Lo cierto es que el partido promete ser más que un simple encuentro deportivo. Será un nuevo capítulo en la novela del Dibu contra Francia, donde la rivalidad futbolística se mezcla con el picante argentino.
