Mientras algunos especulan con su retiro de la Selección, Messi la rompe en Inter Miami con una impresionante racha goleadora que lo mantiene vigente a sus casi 38 años.
¿Se cuida o no se cuida? Messi, la vigencia y un Inter Miami que lo disfruta
A poco más de dos meses de soplar 38 velitas, Lionel Messi demuestra que la edad es solo un número. Si bien su ausencia en la Selección Argentina generó debate sobre un posible cuidado físico pensando en el retiro, el astro argentino brilla con luz propia en el Inter Miami, callando bocas y desatando la locura en la MLS.
Goles, asistencias y una pregunta: ¿quién lo para?
En lo que va del 2025, Leo disputó 9 de los 12 partidos oficiales del equipo dirigido por Javier Mascherano, y sus números son dignos de un extraterrestre: 8 goles y 3 asistencias. Un promedio que recuerda a sus mejores épocas en Barcelona y que deja en claro que el diez sigue más vigente que nunca. ¿Estamos ante un nuevo récord a la vista? Recordemos que el máximo goleador histórico argentino en un año calendario es, con 25 gritos, nada más y nada menos que el Bati, Gabriel Omar Batistuta en 1998.
Messi arrancó el año con un golazo «bajo cero» a Kansas City en la Concachampions, para luego tomarse un breve descanso (ausente en tres partidos) y volver con todo. Si bien la derrota 1-0 ante Los Ángeles FC por la ida de los cuartos de final lo dejó sin convertir, el capitán del Inter Miami se despachó con un gol frente a Toronto y un doblete con asistencia incluida ante Los Ángeles FC en la vuelta, sellando la clasificación a semifinales de la Concachampions. Un Leo que juega, asiste, convierte; y que está, como decía Mostaza Merlo, «con la varita mágica».
El golazo de Messi que abrió la cuenta ante Los Ángeles
¿Un mensaje para Scaloni?
Con este nivel superlativo, Messi no solo silencia las críticas sino que también plantea un interrogante: ¿le estará mandando un mensaje a Lionel Scaloni? ¿Hay chances de verlo con la Albiceleste en la próxima Copa América…o incluso en el Mundial 2026? La pelota, por ahora, pica en Miami, pero el futuro es tan impredecible como un tiro libre del propio Leo.