En el empate 3-3 entre Barracas Central y Central Córdoba, un manotazo de Ledesma a Angulo dejó al colombiano con la nariz sangrando y al Ferroviario pidiendo penal. Ni Rey Hilfer ni el VAR consideraron la falta, desatando la polémica y recordando otros fallos dudosos a favor del Guapo.
¿Manotazo o caricia? La polémica que dejó la nariz de Angulo sangrando y a Central Córdoba sin penal
El empate 3-3 entre Barracas Central y Central Córdoba por la fecha 5 del Torneo Apertura dejó un sabor amargo para el Ferroviario, más allá del resultado. A los 20 minutos del primer tiempo, una jugada en el área de Barracas desató la polémica: Marcos Ledesma, arquero del Guapo, le propinó un manotazo a Luis Angulo que terminó con el delantero colombiano sangrando de la nariz.
La jugada, que a simple vista parecía un claro penal, fue ignorada tanto por el árbitro Leandro Rey Hilfer como por el VAR. En el banco de suplentes de Central Córdoba, comandado por Omar De Felippe, la indignación era palpable. ¿Se durmieron en el VAR? ¿Tenían la vista nublada? Preguntas que resonaban en Sarandí y que seguramente generarán debate en los programas deportivos.
Barracas Central: ¿El nuevo rey de las polémicas arbitrales?
Este episodio no es un hecho aislado para Barracas Central en el torneo. Recordemos el partido contra Banfield en la fecha 3, donde el Guapo se impuso 1-0 con un gol de Kevin Jappert que dejó dudas sobre una posible posición adelantada. En esa ocasión, el VAR, a cargo de Fabrizio Llobet y Javier Mihura, tampoco intervino. Para agregar más leña al fuego, en ese mismo encuentro, un posible penal a favor de Banfield por una falta de Fernando Tobio sobre Tomás Nasif también fue desestimado.
El penal que no le cobraron a Central Córdoba
¿Casualidad o tendencia? ¿Barracas Central está jugando con 12? La seguidilla de fallos arbitrales polémicos a su favor invita a la especulación. Habrá que ver si en las próximas fechas la suerte sigue acompañando al equipo de Rubén Insúa o si la AFA decide tomar cartas en el asunto para evitar que se hable más de los árbitros que del juego.
