Jhohan Romaña, el defensor colombiano de San Lorenzo, habló en exclusiva con TyC Sports. Aseguró que el Ciclón va a pelear el campeonato hasta el final, que está contento en el club y que espera cumplir su contrato. Además, reveló una emotiva anécdota sobre su familia y el cariño de la hinchada.
Romaña: «En San Lorenzo me miman como nunca»
Jhohan Romaña, el caudillo colombiano que defiende los colores de San Lorenzo, se abrió como una flor en una charla mano a mano con TyC Sports. El zaguero, que se perderá el próximo partido contra San Martín de San Juan por acumulación de amarillas (¡a lo Clemente Rodríguez!), habló de todo: del presente del equipo, su futuro en Boedo y hasta se animó a contar una historia que te dejará con el corazón ablandado, como un flancito casero.
El defensor, con 26 pirulos recién cumplidos, aseguró que San Lorenzo va a “pelear hasta el final” el Torneo Apertura. «Estar cuartos después del año que pasamos nos llena de orgullo», tiró el colombiano, dejando en claro que el Ciclón está para pelearle a cualquiera, como el Diego en el Mundial 90. Además, se mostró comprensivo con los hinchas que silbaron tras el empate contra Lanús: “Uno entiende a la gente… el 2024 fue duro”.
Romaña, agradecido con el público azulgrana, reveló un emotivo momento.
Pero el momento más emotivo de la entrevista llegó cuando Romaña contó la visita de su madre y hermana: “Mi vieja y mi hermana vinieron a verme y llorábamos de la emoción porque nunca en mi vida me habían mimado de esta manera”. Una frase que te deja pensando… ¿Será que en Boedo encontraron la fórmula para la felicidad? ¿Será el mate? ¿Los asados? ¿La magia del Nuevo Gasómetro?
El pase que casi fue y el futuro en Boedo
Romaña, que supo vestir las camisetas de Guaraní, Olimpia y hasta patear la pelota en la MLS, contó cómo llegó al Ciclón gracias a una charla con Víctor Salazar, con quien compartió equipo en Paraguay. «El 2022 fue difícil… mi vieja y mi representante me empujaron a venir», confesó. Y agregó: «Ahora estoy en uno de mis mejores momentos”.
El central también reconoció que estuvo a punto de irse en el último mercado de pases. «Hubo clubes interesados, pero no quería irme con la imagen del semestre anterior», explicó, dejando entrever que su amor por el Ciclón pudo más que la guita. Y para terminar de enamorar a los cuervos, sentenció: «Mi cabeza está en San Lorenzo, tengo contrato hasta 2026 y espero respetarlo”. ¿Se imaginan a Romaña levantando una copa con la azulgrana? Un final a lo Hollywood, como la película de Rocky.
