Gago sigue en la cuerda floja en Boca. A pesar del triunfo contra Rosario Central, la eliminación de la Libertadores y los silbidos de la Bombonera dejan su futuro en el aire. Román no lo echó, Gago no renunció: ¿se queda o se va?
¿Habrá que cambiarle el chip al GPS?: El futuro de Gago en Boca es una incógnita
Boca le ganó 1-0 a Rosario Central, un resultado que podría compararse con ponerle una curita a una fractura expuesta. Si bien el triunfo calmó un poco las aguas después del papelón en la Libertadores (chau Libertadores, por segundo año consecutivo, un clásico ya), el futuro de Fernando Gago como DT sigue más indefinido que el penal de Palermo en la Copa América 2011.
Si bien Pintita declaró, tipo Mostaza Merlo post-partido, que tiene «fuerzas para seguir» y dar vuelta la tortilla (¿será de papas?), en el ambiente boquense, tanto dentro como fuera del vestuario, se comenta que el ciclo de Gago está más agotado que el Chavo del 8 en las repeticiones de Telefe.
La 12 habló: Silbidos para Gago, aplausos para Cavani (a pesar del gol errado)
La Bombonera, ese templo del fútbol que a veces parece la cancha de Gasoleros, dejó en claro su postura. No hubo insultos para Marchesín por su «no atajada» en los penales contra Alianza Lima (¿se acuerdan del Topo Gigio de Riquelme?), ni para Cavani por el gol que erró con el arco vacío (un homenaje a Martín Palermo en modo «blooper»). Pero Gago… Gago fue silbado en la previa, en el entretiempo y hasta después del partido. Un concierto de chiflidos que ni el Bambino Veira en sus peores épocas.
Gago, silbado por La Bombonera
¿Se va o no se va? El misterio continúa…
A pesar del clima tenso, Boca mostró signos vitales con la victoria ante el Canalla, que venía puntero e invicto. Pero claro, un triunfo no borra el papelón copero. Es como ganar un partido de truco después de perder la final del mundial de poker.
La pregunta del millón sigue siendo: ¿Qué pasará con Gago?. Riquelme, que también recibió algunos palitos (aunque menos que Benedetto en el último tiempo), no lo echó. Y Gago, a pesar de la presión, no renunció. Un final más abierto que el de Los Soprano. Habrá que esperar las novedades… ¿o nos dejarán con la intriga hasta el próximo partido?.
