Se armó la de San Quintín en Chile: el partido entre Colo Colo y Fortaleza por la Libertadores terminó como el rosario de la aurora. Hinchas chilenos invadieron la cancha y dos personas fallecieron en incidentes previos.
Escándalo en el Monumental: Suspendido el Colo Colo – Fortaleza por invasión de hinchas
Un partido de Copa Libertadores que prometía emociones terminó en un bochorno monumental, y no precisamente por el estadio. El encuentro entre Colo Colo y Fortaleza, que iba 0-0 en el segundo tiempo, se suspendió abruptamente debido a la invasión de hinchas del Cacique al campo de juego. La situación se desmadró cuando un grupo de simpatizantes rompió el acrílico de una de las tribunas, cual Topo Gigio con esteroides, y se metió a la cancha. Los jugadores de Fortaleza, dignos herederos del espíritu de Usain Bolt, salieron disparados al vestuario. Uno se imaginaba al Chavo del 8 diciendo: «Se me chispoteó».
Hinchas de Colo Colo invadieron el campo y Fortaleza se fue al vestuario
Tragedia en la previa: Dos fallecidos en incidentes antes del partido
Pero la cosa venía mal desde antes. En la previa del partido, dos personas perdieron la vida en incidentes a las afueras del Estadio Monumental. Según medios locales, un grupo de hinchas intentó ingresar al estadio sin entradas, generando una situación caótica. En medio del descontrol, un carro lanza gases de Carabineros atropelló a dos personas. «intentar evitar la “avalancha” por la zona de la calle Benito Rebolledo, un carro lanzagases de Carabineros atropelló a dos hinchas». Si bien no hay confirmación oficial, trascendió que los fallecidos tendrían 13 y 18 años. Una situación que nos recuerda a la tragedia de Puerta 12, aunque con un contexto diferente.
¿Qué pasará con Colo Colo y la Copa Libertadores?
Con este panorama, queda la incertidumbre sobre las sanciones que podrían caerle a Colo Colo. ¿Se le dará por perdido el partido? ¿Jugará a puertas cerradas? ¿Será excluido de la Copa? El Tribunal de Disciplina de la CONMEBOL tendrá la última palabra. Lo que está claro es que este lamentable episodio deja una mancha en el fútbol sudamericano y reabre el debate sobre la seguridad en los estadios. Una cosa es el folklore del fútbol, y otra muy distinta es poner en riesgo la vida de las personas.