La tensión entre la expansión minera y la disponibilidad del recurso hídrico vuelve a ocupar la escena sanjuanina. La empresa Casposo Argentina LTD, operadora de la mina homónima ubicada en el departamento de Calingasta, solicitó oficialmente una concesión para extraer 12,46 litros por segundo de agua subterránea, generando inquietud entre diversos sectores locales.
Un pedido con cifras precisas
Según lo publicado en el Boletín Oficial, la compañía —actualmente en proceso de reactivación minera— presentó el expediente N°506-001290-25-EXP ante el Departamento de Hidráulica. La solicitud comprende tres perforaciones con los siguientes caudales:
- Pozo 1: 2,78 l/s
- Pozo 2: 2,78 l/s
- Pozo 3: 6,94 l/s
La suma total se destinaría exclusivamente a “uso Minero” en una parcela identificada como nomenclatura catastral 16-20-600400. Como estipula la legislación vigente, se abrió un plazo de 15 días para que cualquier ciudadano o institución que se considere afectado presente una oposición formal.
El regreso de Casposo: una historia de vaivenes
El proyecto Casposo comenzó su actividad en 2010, bajo la operadora Troy Resources. Su modalidad combinaba minería a cielo abierto y subterránea, y llegó a emplear a más de 400 personas en sus mejores tiempos. Sin embargo, hacia 2019 la mina suspendió operaciones y entró en modo de “cuidado y mantenimiento”.
Actualmente en manos de Austral Gold, Casposo Argentina LTD confirmó que planea reactivar la producción en 2025, para lo cual esta solicitud de agua representa un paso clave.
Agua: el eje estructural del debate
En una provincia con un clima árido extremo, el agua es el recurso más disputado. El Código de Aguas establece un orden de prioridades donde el uso poblacional ocupa el primer lugar, seguido por el agrícola. El uso minero se encuentra en sexto lugar, y su habilitación requiere de un Informe de Impacto Ambiental aprobado.
La inquietud de los productores radica en el riesgo de afectar los acuíferos de los que depende la actividad agrícola, particularmente el cultivo de viñas y frutales. Además, algunos temen un posible descenso del nivel freático y su efecto colateral sobre otras fuentes hídricas como el río Los Patos.
Los actores clave y la necesidad de respuestas
Desde distintos sectores se aguardan definiciones. Casposo Argentina LTD aún no emitió declaraciones públicas sobre el destino específico del agua solicitada ni sobre el tipo de tecnología de extracción que planea usar. Tampoco se conocen, por ahora, oposiciones formales presentadas ante Hidráulica.
Del otro lado, productores rurales, juntas de riego y asambleas ciudadanas piden garantías técnicas e información transparente sobre el estado del acuífero y su capacidad real de abastecimiento.
Académicos de la Universidad Nacional de San Juan también podrían aportar estudios independientes sobre el comportamiento hidrológico de la zona y la sostenibilidad de esta nueva demanda de agua.
Un precedente para toda la minería provincial
La decisión que tome el Departamento de Hidráulica no será menor. Además de definir el futuro inmediato de Casposo, sentará un precedente clave para más de 30 proyectos mineros que buscan avanzar en San Juan.
El expediente continúa su curso. En los próximos días se sabrá si el agua correrá también para la minería o si deberá seguir fluyendo exclusivamente hacia la agricultura y los hogares calingastinos.