<div class="semiton-wrapper" data-texto="¡Bombazo en la Casa Rosada! Adorni, con la seriedad de quien anuncia el apocalipsis (o tal vez la suba del boleto), suelta el drama: ¡Espías rusos sueltos en Argentina!
Según la SIDE, unos compatriotas de Dostoievski, liderados por un tal Lev y una ‘Irina’, estarían tejiendo una red digna de la Guerra Fría, financiada por un… ¿oligarca fallecido? Parece que Putin nos espía hasta desde el más allá.
Mientras tanto, la Embajada Rusa, con esa diplomacia en la que uno no sabe si te están negando todo o solo te están preguntando la hora, responde: ‘¿Quiénes? ¡No están registrados! Es un complot para arruinar la amistad argentino-rusa’. Y piden explicaciones, claro, como si no supieran que acá las explicaciones son más difíciles de conseguir que un café a precio razonable en el aeropuerto.
En fin, entre espías fantasma y diplomáticos con amnesia selectiva, parece que las redes sociales argentinas van a seguir siendo un campo minado de desinformación. ¡Agarrate fuerte al ‘me gusta’, que esto recién empieza!">
Tras el anuncio resonante del Gobierno de Javier Milei, donde se señaló que la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) había identificado a un grupo de ciudadanos rusos con presuntos vínculos en un proyecto de inteligencia internacional liderado por Vladimir Putin, la Embajada de Rusia en Argentina se pronunció enérgico rechazando tales acusaciones. Desde la sede diplomática, se afirmó categóricamente que las personas mencionadas no figuran en los registros consulares.
Además, la Embajada expresó su clara advertencia sobre la existencia de un "intento de perjudicar las relaciones entre Argentina y Rusia" y, en consecuencia, ha formalizado un pedido de "aclaraciones" a la Cancillería argentina respecto al estatus legal de los ciudadanos sindicados como supuestos espías rusos.
La respuesta oficial de la embajada
“Hemos prestado atención a la declaración del vocero de la Presidencia de la Nación Argentina, Manuel Adorni, el 18 de junio sobre el descubrimiento de un ‘grupo de residentes rusos en la Argentina que estaría realizando tareas sospechosas en favor de intereses geopolíticos de Rusia’ presuntamente liderado por Lev Andriashvili e Irina Yakovenko”, inició el comunicado difundido por la representación rusa.
❗Hemos prestado atención a la declaración de Manuel Adorni sobre el descubrimiento de un “grupo de residentes rusos que estarían realizando tareas sospechosas”. Lamentablemente esta no es primer intento de perjudicar las relaciones ruso-argentinas.
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— Embajada de Rusia,AR (@EmbRusiaEnArgEs) June 18, 2025
El texto prosigue detallando la postura oficial: “Las personas mencionadas no están registradas en la sección consular de la embajada. Hemos enviado una nota verbal al Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de Argentina solicitando aclaraciones sobre su estatus legal». Desde el embajada sostienen que «no es la primera oleada de una manía de espionaje relacionada con los intentos de los adversarios de perjudicar las relaciones ruso-argentinas».
**La denuncia desde Casa Rosada**
Previamente, en la conferencia de prensa matutina desde la Casa Rosada, el vocero presidencial Manuel Adorni había revelado públicamente el hallazgo de la SIDE. Adorni afirmó que «La SIDE detectó a un grupo de residentes rusos en la Argentina que estaría realizando tareas sospechosas en favor de los intereses geopolíticos de Rusia, en estrecha colaboración con ciudadanos argentinos».
El portavoz brindó detalles adicionales sobre la investigación, mencionando: «La investigación reveló la existencia de una entidad relacionada al gobierno ruso, denominada ‘La Compañía’, vinculada también con el ‘Proyecto Lakhta’, liderado por un oligarca ruso llamado Yevgeniy Prigozhin, fallecido en agosto de 2023».
En este contexto, Adorni precisó que la Secretaría de Inteligencia del Estado había identificado a Lev Konstantinovich Andriashvili, ciudadano ruso residente en nuestro país, «como líder de la organización, encargado de recibir el financiamiento y promover vínculos con los colaboradores locales junto a su esposa, Irina Iakovenko, ciudadana rusa radicada en la Argentina». El vocero concluyó enfatizando que «La Compañía tiene por objetivo formar un grupo de personas leales a los intereses de Rusia para desarrollar campañas de desinformación e influencia contra el estado argentino», y categóricamente aseveró que el país «no será sometido a la influencia de ninguna otra nación».
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La SIDE detectó a cinco ciudadanos rusos en el país a los que acusa de generar campañas de desinformación contra la Argentina
**El proyecto Lakhta y su historial**
Se trata de una operación que los servicios de inteligencia rusos habrían lanzado hace una década, con el propósito primordial de modificar comportamientos sociales mediante la influencia en las redes sociales. Desde sus inicios en 2014, operaba en territorio ruso, pero posteriormente se expandió a otros países, generando considerable controversia en los Estados Unidos por su presunta injerencia en la campaña presidencial.
Según la información provista por Adorni, el grupo local identificado se encargaría de «la creación y difusión de contenidos en redes sociales, la influencia sobre organizaciones civiles, fundaciones y ONG’s locales, el desarrollo de focus groups con ciudadanos nacionales y la obtención de información política para ser utilizada en favor de los intereses de Rusia».
