Lun. 26.05.2025-10:26
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, no anduvo con vueltas al describir el clima preelectoral que se respira en el distrito más grande del país. Lejos de conformarse con decir que la campaña para las próximas legislativas es “sucia”, el mandatario elevó la apuesta y la catalogó, con vehemencia, de “roñosa”. El dardo tenía destinatarios claros: la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, y el diputado nacional José Luis Espert.
Kicillof citó las declaraciones de ambos dirigentes nacionales que abordaron la compleja problemática de la seguridad en la provincia, un tema sensible y recurrente en el debate público. Pero la crítica no se detuvo allí. El gobernador también apuntó a lo que consideró una “utilización” política de las recientes inundaciones que afectaron diversas localidades bonaerenses, un escenario trágico que, a su juicio, se intenta instrumentalizar con fines electorales.
La respuesta provincial ante la emergencia
En una conferencia de prensa ofrecida este lunes, Kicillof no solo cargó contra sus adversarios políticos. Anunció una medida concreta en respuesta a la dinámica de campaña que, según él, busca desinformar y generar crispación. Informó que, junto a su gabinete, se abocará a confeccionar un reporte exhaustivo que detalle “todas las acciones que se están realizando con respecto a la asistencia de las zonas afectadas por las inundaciones”.
La elaboración de este informe tiene un propósito declarado: anticiparse a lo que consideran un intento por parte del oficialismo nacional de “utilizar» este tema «para hacer daño, mentir, engañar y provocar”. Kicillof calificó esta estrategia como “irresponsable”, estableciendo un paralelismo con el modo en que, desde su óptica, abordan la cuestión de la seguridad en la provincia, sembrando dudas y descalificaciones.
La embestida del gobernador bonaerense marca un inicio de campaña cargado de tensión y cruces verbales, donde las emergencias sociales y los temas de gestión se convierten en argumentos en la disputa política.
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, calificó la actual carrera hacia las legislativas como 'roñosa', no solo sucia. El mandatario provincial apuntó contra figuras nacionales como Patricia Bullrich y José Luis Espert por sus críticas a la seguridad en Buenos Aires y la 'utilización' política de las recientes inundaciones. Anunció la elaboración de un informe detallado sobre la respuesta provincial a la emergencia hídrica, anticipando intentos por parte de la oposición de 'hacer daño, mentir, engañar y provocar' a costa de la tragedia.
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Lun. 26.05.2025-10:26
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, no anduvo con vueltas al describir el clima preelectoral que se respira en el distrito más grande del país. Lejos de conformarse con decir que la campaña para las próximas legislativas es “sucia”, el mandatario elevó la apuesta y la catalogó, con vehemencia, de “roñosa”. El dardo tenía destinatarios claros: la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, y el diputado nacional José Luis Espert.
Kicillof citó las declaraciones de ambos dirigentes nacionales que abordaron la compleja problemática de la seguridad en la provincia, un tema sensible y recurrente en el debate público. Pero la crítica no se detuvo allí. El gobernador también apuntó a lo que consideró una “utilización” política de las recientes inundaciones que afectaron diversas localidades bonaerenses, un escenario trágico que, a su juicio, se intenta instrumentalizar con fines electorales.
La respuesta provincial ante la emergencia
En una conferencia de prensa ofrecida este lunes, Kicillof no solo cargó contra sus adversarios políticos. Anunció una medida concreta en respuesta a la dinámica de campaña que, según él, busca desinformar y generar crispación. Informó que, junto a su gabinete, se abocará a confeccionar un reporte exhaustivo que detalle “todas las acciones que se están realizando con respecto a la asistencia de las zonas afectadas por las inundaciones”.
La elaboración de este informe tiene un propósito declarado: anticiparse a lo que consideran un intento por parte del oficialismo nacional de “utilizar» este tema «para hacer daño, mentir, engañar y provocar”. Kicillof calificó esta estrategia como “irresponsable”, estableciendo un paralelismo con el modo en que, desde su óptica, abordan la cuestión de la seguridad en la provincia, sembrando dudas y descalificaciones.
La embestida del gobernador bonaerense marca un inicio de campaña cargado de tensión y cruces verbales, donde las emergencias sociales y los temas de gestión se convierten en argumentos en la disputa política.