<div class="semiton-wrapper" data-texto="Así que, estimados aficionados al terror digital, Kinetic Games, en una movida que muchos dirán ‘necesaria’ y otros ‘puramente capitalista’ (pero quiénes somos nosotros para juzgar, ¿verdad?), ha decidido que el pánico ya no es suficiente si solo se experimenta a través de una pantalla. No, ahora la ansiedad debe ser física, tangible, y preferentemente, ocupando espacio en nuestras abarrotadas estanterías. Llega Phasmophobia: The Board Game, porque, al parecer, hay límites para la cantidad de veces que uno puede gritarle a su monitor sin sentirse levemente ridículo.
La preventa ya está abierta, lo cual, seamos sinceros, es la verdadera prueba de fe en estos tiempos: pagar por algo que aún no tienes, con la esperanza de que el fantasma que te persiga sea el del correo y no una entidad demoníaca real. Diseñado con la ayuda de Lost in Cult, este “artefacto” promete llevar la caza de espectros del reino virtual a la mesa de café, esa misma mesa donde ya lidiamos con las facturas de servicios y las decisiones trascendentales sobre qué serie mirar. Porque, claramente, la vida cotidiana no nos provee de suficientes dilemas existenciales.
El juego, para 1 a 4 valientes (o insensatos), te equipará con “gadgets paranormales”. Sí, leyó bien, gadgets. Como si el celular no fuera ya el gadget más paranormal que tenemos, capaz de mostrarnos el futuro de nuestro endeudamiento con solo un par de clics. La premisa es la misma: recorrer casas que, de no ser por los fantasmas, serían una ganga inmobiliaria en cualquier mercado. Y ahí, damas y caballeros, buscar esas entidades que pondrán a prueba su cordura y, más importante aún, su capacidad para no estrangular a sus compañeros de juego cuando fallen una tirada de dados crítica. Como el espíritu de la Navidad, pero con menos renos y más lamentos espectrales.
Y la “producción premium”, ah, la dulce música del marketing. Mapas que “recrean con precisión” las locaciones del videojuego. ¡Por supuesto! Porque no querríamos que la casa embrujada de cartón fuera menos fiel a la versión digital que nuestros propios recuerdos distorsionados. Cada componente, desde los tokens hasta los equipos EMF, ha sido “pensado para transmitir la misma tensión”. Un esfuerzo titánico, sin duda, para que el simple acto de mover un peón te haga sudar frío, como si estuvieras intentando pagar la tarjeta de crédito a fin de mes. Todo esto, por supuesto, presentado en una “edición de colección”. Porque si vas a sufrir un infarto por miedo, qué menos que sea con estilo, y que el objeto de tu tormento sea lo suficientemente bonito como para exhibirlo en la vitrina junto a tus figuritas de acción y tus recibos de sueldo impagos. Phasmophobia: The Board Game. Porque el miedo, ahora, también se paga en cuotas.">
El aclamado terror digital se traslada al tablero
Kinetic Games, estudio responsable del popular videojuego de horror cooperativo Phasmophobia, ha oficializado la disponibilidad en preventa de su adaptación al formato físico: Phasmophobia: The Board Game. Esta incursión en el mundo de los juegos de mesa, gestada en colaboración con la editorial Lost in Cult, busca replicar la intensa experiencia de caza de fantasmas que cautivó a millones de jugadores en PC y consolas, ahora en un formato tangible.
El juego de mesa invita a grupos de 1 a 4 participantes a sumergirse en la piel de investigadores paranormales. Equipados con una batería de “gadgets” especializados en la detección de entes espectrales, los jugadores deberán explorar minuciosamente casas embrujadas, recabando pistas y enfrentándose a la creciente amenaza de entidades sobrenaturales. La dinámica del título pondrá a prueba no solo la estrategia y el ingenio individual, sino también la cohesión del equipo y su capacidad para mantener la cordura ante lo inexplicable, emulando la tensión psicológica que caracteriza al videojuego original.
Diseño meticuloso y una edición para coleccionistas
El desarrollo de Phasmophobia: The Board Game ha estado a cargo del equipo de Lost in Cult, con la dirección artística del ilustrador Jamie Flack, cuyo trabajo contribuye a forjar una atmósfera visual inmersiva. El proyecto se ha enfocado en ofrecer una “producción premium”, un aspecto clave para los entusiastas del género y los coleccionistas. Los tableros, por ejemplo, han sido diseñados para recrear con una precisión notable las locaciones más icónicas y reconocibles para los aficionados al videojuego.
Cada elemento del juego de mesa, desde los tokens distintivos hasta las réplicas de equipos como los medidores EMF, ha sido concebido con el propósito explícito de transmitir la misma sensación de opresión y suspenso que se experimenta en su contraparte digital. Esta atención al detalle se traduce en una edición de colección que no solo pretende destacar durante las partidas, sino también erigirse como una pieza central en las vitrinas de los aficionados al terror y a los juegos de mesa, consolidando la expansión de la franquicia Phasmophobia más allá de las pantallas.
Para aquellos interesados en conocer más detalles sobre la propuesta o visualizar los primeros adelantos de la experiencia de juego, pueden acceder al video de presentación oficial:
Kinetic Games ha puesto en preventa Phasmophobia: The Board Game, una adaptación de mesa del célebre videojuego de terror cooperativo. Desarrollado junto a Lost in Cult, el juego propone a 1 a 4 participantes una inmersión física en casas embrujadas, utilizando equipamiento paranormal para confrontar entidades y desafiar el trabajo en equipo bajo una producción de alta calidad que busca replicar la tensión original.
Resumen generado automáticamente por inteligencia artificial
<div class="semiton-wrapper" data-texto="Así que, estimados aficionados al terror digital, Kinetic Games, en una movida que muchos dirán ‘necesaria’ y otros ‘puramente capitalista’ (pero quiénes somos nosotros para juzgar, ¿verdad?), ha decidido que el pánico ya no es suficiente si solo se experimenta a través de una pantalla. No, ahora la ansiedad debe ser física, tangible, y preferentemente, ocupando espacio en nuestras abarrotadas estanterías. Llega Phasmophobia: The Board Game, porque, al parecer, hay límites para la cantidad de veces que uno puede gritarle a su monitor sin sentirse levemente ridículo.
La preventa ya está abierta, lo cual, seamos sinceros, es la verdadera prueba de fe en estos tiempos: pagar por algo que aún no tienes, con la esperanza de que el fantasma que te persiga sea el del correo y no una entidad demoníaca real. Diseñado con la ayuda de Lost in Cult, este “artefacto” promete llevar la caza de espectros del reino virtual a la mesa de café, esa misma mesa donde ya lidiamos con las facturas de servicios y las decisiones trascendentales sobre qué serie mirar. Porque, claramente, la vida cotidiana no nos provee de suficientes dilemas existenciales.
El juego, para 1 a 4 valientes (o insensatos), te equipará con “gadgets paranormales”. Sí, leyó bien, gadgets. Como si el celular no fuera ya el gadget más paranormal que tenemos, capaz de mostrarnos el futuro de nuestro endeudamiento con solo un par de clics. La premisa es la misma: recorrer casas que, de no ser por los fantasmas, serían una ganga inmobiliaria en cualquier mercado. Y ahí, damas y caballeros, buscar esas entidades que pondrán a prueba su cordura y, más importante aún, su capacidad para no estrangular a sus compañeros de juego cuando fallen una tirada de dados crítica. Como el espíritu de la Navidad, pero con menos renos y más lamentos espectrales.
Y la “producción premium”, ah, la dulce música del marketing. Mapas que “recrean con precisión” las locaciones del videojuego. ¡Por supuesto! Porque no querríamos que la casa embrujada de cartón fuera menos fiel a la versión digital que nuestros propios recuerdos distorsionados. Cada componente, desde los tokens hasta los equipos EMF, ha sido “pensado para transmitir la misma tensión”. Un esfuerzo titánico, sin duda, para que el simple acto de mover un peón te haga sudar frío, como si estuvieras intentando pagar la tarjeta de crédito a fin de mes. Todo esto, por supuesto, presentado en una “edición de colección”. Porque si vas a sufrir un infarto por miedo, qué menos que sea con estilo, y que el objeto de tu tormento sea lo suficientemente bonito como para exhibirlo en la vitrina junto a tus figuritas de acción y tus recibos de sueldo impagos. Phasmophobia: The Board Game. Porque el miedo, ahora, también se paga en cuotas.">
El aclamado terror digital se traslada al tablero
Kinetic Games, estudio responsable del popular videojuego de horror cooperativo Phasmophobia, ha oficializado la disponibilidad en preventa de su adaptación al formato físico: Phasmophobia: The Board Game. Esta incursión en el mundo de los juegos de mesa, gestada en colaboración con la editorial Lost in Cult, busca replicar la intensa experiencia de caza de fantasmas que cautivó a millones de jugadores en PC y consolas, ahora en un formato tangible.
El juego de mesa invita a grupos de 1 a 4 participantes a sumergirse en la piel de investigadores paranormales. Equipados con una batería de “gadgets” especializados en la detección de entes espectrales, los jugadores deberán explorar minuciosamente casas embrujadas, recabando pistas y enfrentándose a la creciente amenaza de entidades sobrenaturales. La dinámica del título pondrá a prueba no solo la estrategia y el ingenio individual, sino también la cohesión del equipo y su capacidad para mantener la cordura ante lo inexplicable, emulando la tensión psicológica que caracteriza al videojuego original.
Diseño meticuloso y una edición para coleccionistas
El desarrollo de Phasmophobia: The Board Game ha estado a cargo del equipo de Lost in Cult, con la dirección artística del ilustrador Jamie Flack, cuyo trabajo contribuye a forjar una atmósfera visual inmersiva. El proyecto se ha enfocado en ofrecer una “producción premium”, un aspecto clave para los entusiastas del género y los coleccionistas. Los tableros, por ejemplo, han sido diseñados para recrear con una precisión notable las locaciones más icónicas y reconocibles para los aficionados al videojuego.
Cada elemento del juego de mesa, desde los tokens distintivos hasta las réplicas de equipos como los medidores EMF, ha sido concebido con el propósito explícito de transmitir la misma sensación de opresión y suspenso que se experimenta en su contraparte digital. Esta atención al detalle se traduce en una edición de colección que no solo pretende destacar durante las partidas, sino también erigirse como una pieza central en las vitrinas de los aficionados al terror y a los juegos de mesa, consolidando la expansión de la franquicia Phasmophobia más allá de las pantallas.
Para aquellos interesados en conocer más detalles sobre la propuesta o visualizar los primeros adelantos de la experiencia de juego, pueden acceder al video de presentación oficial: