La startup de inteligencia artificial Perplexity, conocida por su innovador buscador Comet, ha sacudido el tablero tecnológico con una oferta audaz: 34.500 millones de dólares para adquirir Chrome, el navegador insignia de Google. La propuesta llega en un momento crucial, con Alphabet, la empresa matriz de Google, enfrentando un juicio antimonopolio en Estados Unidos que podría forzarla a desprenderse de su popular explorador.
¿Una jugada estratégica o un sueño ambicioso?
La oferta de Perplexity, revelada por _The Wall Street Journal_, supera con creces las estimaciones iniciales de los analistas, quienes valoraban Chrome en alrededor de 18.000 millones de dólares. La startup asegura contar con el respaldo de varias firmas de inversión para concretar la adquisición y ha manifestado su seriedad en llevar adelante la transacción.
Desde 2024, Alphabet está bajo la lupa del juez Amit Mehta, acusado de incurrir en prácticas anticompetitivas para mantener su dominio en el mercado de búsquedas. Aunque Google niega rotundamente las acusaciones, el proceso judicial sigue su curso y se evalúan posibles medidas correctivas, incluyendo la venta de Chrome y la prohibición de pagos a fabricantes para favorecer a Google como buscador predeterminado.
El futuro de Chrome en juego
Si Alphabet se viera obligada a vender Chrome, Perplexity se posiciona como el principal contendiente para hacerse con la infraestructura consolidada del navegador. No obstante, Google no ha manifestado ninguna intención de desprenderse voluntariamente de su producto estrella.
Algunos analistas sugieren que la oferta de Perplexity podría ser una jugada estratégica para presionar al juez Mehta y demostrar la existencia de un comprador serio en caso de que se ordene la venta. Perplexity ha enviado una carta formal al CEO de Alphabet, Sundar Pichai, afirmando que su propuesta «está diseñada para satisfacer una medida antimonopolio en el más alto interés público, al colocar Chrome en manos de un operador independiente y competente».
Actualmente, Chrome cuenta con cerca de 3.500 millones de usuarios a nivel mundial y ostenta más del 60% del mercado global de navegadores. La adquisición, de concretarse, marcaría un antes y un después en la industria tecnológica.