La IA se abre paso en la Justicia Latinoamericana: ¿Solución o Dolor de Cabeza?
La inteligencia artificial (IA) está transformando silenciosamente los sistemas judiciales de América Latina, prometiendo mayor eficiencia y acceso a la justicia. Sin embargo, como un buen fernet con cola, esta innovación tiene sus bemoles.
Sor Juana y la democratización del Derecho
Un ejemplo palpable es «Sor Juana», una herramienta que, según Juan González, magistrado y coordinador del proyecto, ha logrado «disminuir las barreras de comprensión y acceso informativo». Con más de 15,500 usuarios únicos y 34,000 consultas, Sor Juana parece ser la Messi de los chatbots legales.
La Brecha Digital: El Talón de Aquiles de la Justicia 4.0
Pero no todo es alegría en el mundo de los bits y bytes. Saúl López Noriega, investigador del Tecnológico de Monterrey, señala que la «brecha digital» sigue siendo un obstáculo considerable. En criollo, muchas comunidades que necesitan acceso a la justicia también carecen de internet. ¡Un verdadero catch-22!
El Foro Económico Mundial agrega que solo dos tercios de los hogares en la región tienen acceso a internet, una cifra que palidece frente al promedio de la OCDE. En zonas rurales, la situación es aún más crítica.
¿Confianza Cero? La Desconfianza Ciudadana en la IA Judicial
Otro desafío no menor es la desconfianza ciudadana. Un estudio de Ipsos revela que el 54% de los encuestados a nivel global rechaza el uso de IA para tomar decisiones judiciales, con Argentina liderando la resistencia con un 58%. ¡Parece que la gente prefiere al juez de carne y hueso antes que al algoritmo!
La falta de marcos regulatorios claros tampoco ayuda. Si bien el uso de asistentes inteligentes en el ámbito legal se ha extendido, aún no existen leyes que definan sus límites ni garanticen la protección de datos personales.
El Rol de las Big Tech: ¿Socios o Villanos?
La legislación avanza a paso de tortuga en comparación con la tecnología. Brasil ha sido pionero con la Resolución 332/2020, que exige pruebas de no discriminación y trazabilidad de datos a los modelos de IA. Argentina, Colombia y México también están discutiendo lineamientos éticos similares.
Los especialistas coinciden en la necesidad de regular la IA judicial a nivel local y regional, contemplando el papel crucial de las grandes empresas tecnológicas. Como proveedores de infraestructura, estas compañías deben operar con «altos estándares de seguridad y ética», según Bonilla.
En definitiva, la IA tiene el potencial de transformar la justicia en América Latina, pero su implementación requiere cautela, reflexión y regulación. Como bien resume Bonilla: «La IA es una herramienta que puede beneficiar a la sociedad, pero nunca hay que olvidar que es solo eso: una herramienta, y nada más».
